Acto de la Academia Venezolana de la Lengua para incorporar a Corina Yoris Villasana como individuo de número.
En el mismo se encontraron presentes la líder María Corina Machado y diferentes líderes políticos.
Ser un «individuo de número» de la Academia Venezolana de la Lengua es un honor y una distinción.
- Los individuos de número son miembros destacados y excepcionalmente cualificados que forman parte de la Academia. Son elegidos por el pleno de la academia debido a su experiencia y conocimiento en las materias relacionadas con el idioma y la lingüística.
- Como individuos de número, tienen voz y voto en las decisiones de la Academia. Además, pueden desempeñar cargos importantes dentro de la institución.
- Su labor es fundamental para velar por la unidad, corrección y enriquecimiento del idioma castellano en Venezuela.
La profesora Corina Yoris, quien ocupará el sillón O, es licenciada en Filosofía y en Letras, así como doctora en Historia egresada de la UCAB. Fue presidenta de la Sociedad Venezolana de Filosofía y presidenta de la Sociedad Venezolana de Lógica.
Desde 1981 impartió clases en la Escuela de Filosofía y en el Doctorado en Filosofía de esta casa de estudios, del cual fue su directora. Actualmente es docente jubilada de la institución.
«Además de ser un honor, una distinción extraordinaria, también es un gran compromiso porque no solamente es la representación a título personal, sino el de tener la pertenencia a la Universidad Católica Andrés Bello, donde yo he desarrollado gran parte de mi vida académica. Me siento realmente comprometida con la institución, en que mi permanencia en la Academia sea también un reconocimiento a toda la formación dada por la Universidad Católica. Recuerdo con enorme aprecio a los profesores que, dentro de la Escuela de Letras, me dieron clases, me enseñaron, me llevaron de la mano para inculcarme ese amor por las letras, por la literatura, por la crítica literaria, como también por la filosofía«, comentó Yoris.
La profesora ya había manifestado, en un mensaje en la red social X, su alegría por ocupar el mismo sillón que tuvieron los escritores Eduardo Blanco y Rómulo Gallegos.