Las terribles consecuencias de la gota fría en la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y partes de Andalucía sigue haciendo estragos en la sociedad española. Cientos de personas se han visto despojadas de sus viviendas a causa de las fuertes inundaciones y, al igual que ha ocurrido con cientos de víctimas del volcán de La Palma —que viven en casas-contenedor—, están teniendo que ser alojadas en pabellones y polideportivos.
Se ha abierto el pabellón deportivo de Benimaclet con medio centenar de plazas como albergue además del CAES Santa Cruz de Tenerife para atender a las personas que lo necesiten.
El Ayuntamiento de Valencia también dispuso que el Centro de Atención de Emergencias Sociales (CAES) funcionase de forma ininterrumpida entre las 20.00 del martes, 29 de octubre, y las 8.00 del miércoles, 30 de octubre, con el fin de brindar atención a personas sin hogar que necesiten refugio y ayuda básica. Situado en la calle Santa Cruz de Tenerife, el CAES se mantiene abierto para quienes carecen de vivienda, ofreciendo servicios de higiene y protección contra la lluvia. Las derivaciones al centro pueden realizarse a través del Servicio de Atención a las Urgencias Sociales (SAUS) y del Centro de Atención Social a Personas sin Techo (CAST).
Paralelamente, la Fundación Deportiva Municipal (FDM) ha anunciado la suspensión de todas las actividades al aire libre programadas en instalaciones municipales, aunque las actividades en espacios cerrados continuarán con normalidad. También está previsto abrir otra instalación deportiva en caso de que fuera necesario, para pasar la noche. En concreto, los de Benicalap y Benimaclet.
Destinan 170 millones en alojar inmigrantes ilegales
Mientras tanto, cabe destacar que el Consejo de Ministros aprobó el pasado febrero la ampliación de la declaración de emergencia para atender y alojar en hoteles a los inmigrantes ilegales que llegan al archipiélago canario. Con esta última ampliación de 60,6 millones euros, el Ejecutivo había invertido ya un total de 170 millones desde el mes de octubre para la primera atención y al alojamiento de aquellos inmigrantes que llegan a Canarias. Es decir, en tan sólo cinco meses.
A partir de entonces, las ayudas económicas a ONG’s encargadas de la gestión de estos inmigrantes ilegales en hoteles ha aumentado de forma considerable. Una de las noticias más polémicas de septiembre fue el alojo gratuito de 200 recien llegados a Tossa de Mar (Gerona) en un hotel de 4 estrellas, con piscina, «spa» y gimnasio.
Ese mismo mes, el hotel Alegría del barrio almeriense de El Toyo acogió a un centenar de inmigrantes de origen subsahariano, principalmente de Gambia y Senegal, procedentes de Canarias como parte del programa de atención humanitaria coordinado desde el Ejecutivo central para dar respuesta a la avalancha migratoria.
El establecimiento, que ya sostuvo un dispositivo similar con 440 plazas entre octubre de 2023 y mayo de este año, fue el seleccionado para poder dar acogida a los inmigrantes trasladados desde las islas en el marco del programa «Demcan».
El emplazamiento gestionado por Accem —anteriormente estuvo gestionado por Cruz Roja— atendió durante su anterior etapa a unas 1.400 personas que eran alojadas temporalmente mientras se tramitaba su situación de manera individualizada.