Vía Banca y Negocios
Expertos consultados por Banca y Negocios analizan los escenarios de recuperación petrolera, los cuales estarán determinados por variables internas y externas, como el resultado de las elecciones de EEUU
La producción petrolera venezolana muestra una tendencia de crecimiento, pero la meta de superar de manera estable el listón del millón de barriles por día, sigue siendo una ambición elusiva.
La gran pregunta es qué escenarios se abren para el sector petrolero venezolano, en el contexto político y ante el rumbo que tome Estados Unidos después de las elecciones de noviembre, ya que es el país que lidera el esquema de sanciones que afecta a la extracción y comercialización de crudo venezolano.
Cisneros: se puede mantener el status quo
El doctor Alberto Cisneros es CEO y presidente de Global Business Consultants, una empresa que asesora a compañías petroleras –desde hace dos décadas- en buena parte de América Latina.
Cisneros comienza por tocar el tema de la exploración. “Nosotros tenemos datos de Baker Hughes, que es una de las principales compañías de servicios que están en Venezuela. Efectivamente, tenemos funcionando un par de taladros apenas, frente a los 70 que solía haber”, precisa el especialista.
Y ofrece la explicación: la estatal PDVSA no está priorizando nueva producción, sino que el plan es usar un tipo de taladro llamado “wakeover” que permite recuperar la producción diferida, en consecuencia, la fase exploratoria está desfasada de la orientación del portafolio de planificación de la petrolera estatal venezolana.
Vamos a la producción. “Tenemos en nuestros análisis tres datos: la información oficial, las fuentes secundarias, y lo que levantamos nosotros”, aclara Cisneros.
Fuentes oficiales: enero 2024 arranca en 840.000 barriles diarios (b/d) y termina en septiembre en 940.000 b/d; la curva es de gradual y progresivo crecimiento.
Fuentes secundarias: 800.000 b/d en enero de 2024 para llegar a 860.000 b/d en la actualidad.
“Nuestras cifras: 790.000 b/d en enero hasta 840.000 b/d en septiembre. La curva de las fuentes secundarias como las nuestras tiene una represión en abril y mayo”, expone Cisneros.
Ahora bien, ¿Qué pasa con el petróleo liviano del lago de Maracaibo? “De la producción de 840.000 b/d, apenas 195.000 b/d provienen del lago de Maracaibo”, va al detalle.
Esto se debe a una declinación natural de la cuenca del Lago de Maracaibo, que es la segunda declinación natural más antigua del mundo. Por otro lado, PDVSA no tiene la capacidad para mejorar la producción, y se concentra en el petróleo pesado de la Faja del Orinoco.
En condiciones más adecuadas de acceso a financiamiento e inversión, se podría llegar a 880.000 b/d a fines de este año. Pero, el escenario que plantea que plantea el consultor especializado Alberto Cisneros es que se mantenga el status quo.
Asimismo, si se produjera una apertura más institucionalizada y estructural a la inversión privada, para 2030, Venezuela podría llegar a producir 1.900.000 b/d, sostiene el especialista.
Las sanciones
¿Qué pasa con las sanciones? El proceso, dice Cisneros, ha sido gradual y progresivo. El 28 de abril de este año, se endurecieron algunas sanciones ante el incumplimiento de las condiciones electorales por parte del gobierno, pero de una manera relativamente laxa.
Si gana Donald Trump es posible que vuelvan las sanciones agresivas. “Después de cierto tiempo, quien resulta afectado es quien impone las sanciones, porque el sancionado busca como mercadear por los caminos verdes”, topa con una realidad palmaria.
La producción no crece
En su trinchera, Oswaldo Felizzola es ingeniero mecánico, egresado de la Universidad Simón Bolívar (USB). Posee un Diploma en Gerencia de Proyectos de la Universidad Metropolitana (CENDECO) y una Maestría en Administración (MBA) del IESA (Venezuela).
Según los cálculos de Felizzola, Venezuela promedia una producción de 875.000 barriles por día, aunque las cifras oficiales hablan de una extracción que supera los 900.000 bpd.
El experto dice que su estimación de la producción petrolera no ha crecido mayormente en el tiempo, un síntoma preocupante sobre la industria petrolera.
– ¿Por qué no estamos incrementando la producción?
– En primer lugar, por falta de capitales. Necesitamos grandes inversiones. PDVSA debe comenzar a comprar más taladros. Luego, están las sanciones, ya que PDVSA sigue asociada con temas de impago. No se ha dado una reestructuración de deuda, por otra parte.
«El área del negocio petrolero que es más intensiva en capital es la exploración. Este no es el problema, porque el país cuenta con reservas probadas para 400 años; el problema es la producción», subraya Felizzola.
Resalta que antes la gente podía comprar bonos de PDVSA para proteger sus capitales, pero eso ya no es posible por las sanciones que pesan sobre la petrolera estatal.
Las elecciones en EEUU
En cuanto a la repercusión de las elecciones en EEUU sobre el sector petróleo venezolano, “manejamos dos escenarios”, dice el ingeniero y especialista en la materia petrolera Oswaldo Felizzola.
-Si gana Trump se pueden recrudecer las sanciones, pero no en el corto plazo, porque tiene en la agenda internacional situaciones más importantes que Venezuela, como el conflicto en el Oriente Medio. En los próximos tres o cuatro años la actividad de Chevron en Venezuela se va a mantener estable.
«Si gana Harris, probablemente sigamos como venimos», afirma simplemente.
“Las empresas extranjeras que operan en el sector petrolero venezolano no están haciendo inversiones de capital, sino gastos concretos para recuperar deuda”, apunta el experto.
En cuanto a la producción tope en el mediano plazo –con el status quo– es difícil que se pueda estabilizar en 950.000 barriles por día
Con una estrategia petrolera más abierta al mercado internacional se podría llegar a una producción de 1.500.000 barriles diarios.