El mandatario estadounidense Joe Biden viajó a Virginia (este) con su vicepresidenta Kamala Harris para defender en un mitin el derecho al aborto, amenazado o ya prohibido en gran medida en algunos estados gobernados por los republicanos.
El derecho al aborto, la inmigración y la inflación se perfilan como los principales temas de estas elecciones en un país todavía muy polarizado.
“Donald Trump es el principal responsable de quitar esta libertad en Estados Unidos”, afirmó en un discurso interrumpido varias veces por manifestantes propalestinos que protestaban contra la ofensiva israelí en Gaza.
Cerca de diez personas, que terminaron expulsadas del recinto, proclamaron eslóganes a lo largo de la intervención de Biden.
“Esto nos va a llevar un tiempo. Tenían todo esto planeado”, remarcó Biden entre las diferentes interrupciones, en las que el público también mostró su apoyo al mandatario mientras él permanecía en silencio, según informó la Casa Blanca.
Los manifestantes pro-Hamas interrumpieron el discurso del presidente varias veces, convirtiendo todo el evento en un circo, y fue entonces cuando Biden hasta negó resultados electorales.
El caos continuó a partir de ahí. Biden fue interrumpido no una, ni dos, sino al menos 13 veces . Se puso tan de mal humor que empezó a murmurar su viejo pilar de no saltar. Finalmente, el Servicio Secreto tuvo que rodearlo para poder garantizar su seguridad al salir del escenario.