Cada vez más en el día a día escuchamos sobre las regulaciones del Estado, el Estado regulador, el Estado de bienestar, el Estado presente y conceptos similares, debemos por comenzar haciéndonos la pregunta: ¿Qué es el Estado presente?
Por: Martín Nicolás Batista – Visión Liberal
Se podría decir que el Estado presente, como concepto jurídico y político, surge ante la necesidad de normar actividades económicas complejas, comprende un diseño institucional de intervención en determinadas industrias, no se deja al libre mercado su autorregulación, garantizando el desarrollo nacional, social y garantía de los derechos humanos. Esto suena maravilloso, pero ¿el Estado realmente hizo bien esto?
Se habla como si el Estado fuera una solución mágica a todo, la solución a los aumentos de precios, al narcotráfico, inflación, etc.; pero no nos olvidemos que quienes controlan el Estado son simples seres humanos, y si las bases de la idiosincrasia misma de un país democrático son decadentes, la rectitud moral de quienes gobiernan estará corrupta.
Existe evidencia histórica para demostrar todas las fallas del gobierno desde sus orígenes, las primeras civilizaciones tienen aproximadamente 6.000 años. Las más estudiadas son el Imperio Egipcio, la Mesopotamia, las dinastías Chinas, y el Imperio Romano. Todos fueron gobiernos que se centraban en la fuerza y la dominancia, y si bien hoy en día existe un gran avance humanitario frente a todas estas cuestiones, esto no refleja que un Estado sea eficiente, y cuando este es corrupto se vulneran el progreso y los derechos humanos.
A partir de la Primera Guerra Mundial hubo un cambio en cómo se manejaban los Estados, y de ahí comenzaron a encargarse de más cuestiones, como pensiones, educación, salud, etc. Y como sabemos que nada es gratis, se recaudaban más impuestos, pero los gobiernos mienten a la gente diciendo que es gratis. En Latinoamérica quieren justificar la suba de impuestos diciendo que los países ricos tienen altos impuestos, obviando el crecimiento económico y valor agregado
¿El Estado presente ayuda a la economía de los ciudadanos?
Cuando se habla de libertad económica se habla de que los ciudadanos sean libres. Si tomamos el índice de libertad económica de los países antes de la pandemia, utilizando como fuente a The Heritage Foundation, 2019 Index of Economic Freedom, los países de Latinoamérica encabezan puestos desde “Moderadamente Libre” hasta “Represivo”.
La libertad económica abarca desde: Estado de derecho, tamaño del Estado, apertura de los mercados, recaudación de impuestos, salud fiscal, derecho de propiedad, integridad del gobierno y gasto estatal. En un país con economía moderada el crecimiento de la economía de los ciudadanos será moderada, en un país represivo su crecimiento será represivo.
Conclusión: Con estos datos en la mesa, en Latinoamérica ¿el Estado presente fue la solución?
La respuesta clara y contundente que tenemos es que claramente no, social, económica y políticamente hablando solamente generó decadencia. En la Argentina, en 13 de las 23 provincias, el empleo público supera al privado y algunas provincias ni siquiera llegan a producir un tercio de lo que se gasta. Estas medidas solamente frenan el crecimiento económico de un país, ya que el sector público no genera nada, salvo populismo, e incrementa la corrupción y el poder sin límites por parte del Estado.