El opositor Edmundo González aseguró este lunes 16 de diciembre en entrevista con EFE estar consciente de los riesgos de su regreso al país, pero insistió en que está previsto » a partir» del 10 de enero para «asumir el mandato y hacer respetar la voluntad soberana del pueblo de Venezuela».
«Con temor no se va a la guerra. Yo no voy a una guerra, pero sí voy a la recuperación de la democracia venezolana y voy con mucho esfuerzo y con mucha voluntad para recomponer la legalidad democrática en Venezuela», dijo González en la víspera de recoger el premio Sájarov a la libertad de conciencia en la sede del Parlamento Europeo en Estrasburgo, Francia.
Edmundo González dijo desde Francia que aprovechará este viaje para reunirse con la nueva alta representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Kaja Kallas, para transmitirle «de viva voz las aspiraciones del pueblo de Venezuela en el respaldo de la Unión Europea».
El Consejo de la Unión Europea decidió no reconocer a Nicolás Maduro como presidente electo, pero tampoco reconocieron a Edmundo González; sin embargo, el opositor sí fue reconocido de manera simbólica por el Parlamento Europeo.
«Aspiramos a que ese respaldo se materialice con fuerza. La UE es fundamental en este proceso nuestro de la recuperación de la democracia en Venezuela y aspiramos a un esfuerzo mayor por alcanzar el reconocimiento pleno de la UE», señaló González, que afirmó que el mundo está «pendiente de decisiones fundamentales para que se comprenda el proceso político» en el país.
En este proceso hacia el reconocimiento europeo de su figura como presidente legítimo de Venezuela, González señaló que, aunque se podría «aspirar a más», al Gobierno español «ha venido haciendo un esfuerzo importante» por el reconocimiento de su candidatura y le ha dado un respaldo «moral y material» al concederle asilo político en Madrid.
Edmundo González adelantó que «próximamente» mantendrá una reunión en persona con el ministro de Asuntos de Exteriores, José Manuel Albares, en la que abordarán el tema del reconocimiento por parte del Gobierno de España, entre otros temas.
Sobre la estrategia para su regreso a Venezuela, González reafirmó que tienen un plan «que no podemos revelar por razones estratégicas, pero nuestra intención es llegar a Venezuela a partir del 10 de enero para asumir el mandato y hacer respetar la voluntad soberana del pueblo de Venezuela»; de la misma manera, dijo estar «tranquilo y trabajando mucho por el país» desde Madrid.
González subrayó que se mantiene activo en el esfuerzo «por recuperar la reinstitucionalización de la democracia en Venezuela y por un Gobierno que dé cabida a todos». «Queremos llegar a una normalidad democrática donde un adversario sea nada más que eso, un adversario y no un enemigo. Eso es a lo que aspiramos para todos los venezolanos», añadió.
El premio Sájarov que le ha otorgado la Eurocámara junto a María Corina Machado y que recibirán este 17 de diciembre es, dijeron, un galardón que asumen «con responsabilidad y como un reconocimiento al pueblo venezolano». Comparte esta idea Ana Corina Sosa, hija de Machado, que recibirá el premio en nombre de su madre porque ésta se encuentra aún en la clandestinidad en su país de origen.
Ana Corina Sosa contó a EFE que habla todos los días con la líder de la oposición, María Corina Machado, «por métodos seguros y tomando precauciones, por supuesto. La tienen muy vigilada, pero cada vez que hablo con ella me impresiona muchísimo su compostura, su tranquilidad», explicó.
Sosa añadió que Machado «está muy presente en Venezuela, (…) nunca va a dejar la lucha del lado de los venezolanos» y reconoció que ni siquiera ella sabe dónde se oculta su madre para protegerse de las represalias del gobierno de Nicolás Maduro.
La hija de María Corina Machado incidió en que «hay un plan» para el próximo 10 de enero y pronosticó «días muy movidos» en el país en los que la oposición tendrá que ser «bastante ágil». «Ella lo ha dicho muy claro, va a estar del lado de Edmundo y vamos adelante hacer una transición de poder que como es debido y como es lo legal», añadió.
Sosa, que vive fuera de Venezuela al igual que sus dos hermanos por motivos de seguridad, sostiene que las autoridades pueden intentar hacerle daño a su madre a través de ella y dijo que tendrá que tomar precauciones cuando vuelva a Venezuela, pero asegura que «no hay nada que más desee» que regresar a su país.
