Morfema Press

Es lo que es

El conflicto fronterizo colombo-venezolano: más leña al fuego

Comparte en

Por Alex Fergusson en El Debate

Se cree que el exterminio de las disidencias de las FARC, quien controló la zona de El Catatumbo hasta 2016, fue planeado desde 2024 por orden del Cartel de los Soles para beneficiar a Maduro

La guerra que desató el grupo narco-paramilitar colombiano Ejército de Liberación Nacional (ELN), en la región del Catatumbo fronteriza con Venezuela, contra las bandas de las disidencias de las FARC, no es solo una simple venganza por el control del negocio del narcotráfico, como se ha dicho, pues detrás están los intereses de las autoridades venezolanas para controlar la frontera, asegurar su retaguardia y frenar cualquier plan de invasión para derrocarlo, pues se convirtió en el primer filtro de seguridad en las fronteras colombiana y brasilera para el gobierno bolivariano.

Según una publicación de la revista Semana, las unidades de inteligencia del gobierno colombiano y muchos líderes sociales, creen que «es muy probable» que Maduro tenga responsabilidad en la matanza o desaparición de unas 100 personas entre civiles y paramilitares y el desplazamiento de más de 40 mil habitantes de la zona, considerada la más grande crisis registrada en 30 años en Colombia.

Se cree que el exterminio de las disidencias de las FARC, quien controló la zona de El Catatumbo hasta 2016, fue planeado desde 2024 por orden del Cartel de los Soles venezolano, quien financió la acción para recuperar el mercado de la hoja de coca, castigar la «indisciplina y deslealtad» de las FARC y por el debilitamiento que este está causando al ELN, en momentos en que necesitan a su aliado, para frenar cualquier operación fronteriza que pueda afectar a la dictadura.

Ese es el origen de la crisis que hoy tiene sitiado al Catatumbo: «El ELN perdió poder y eso se tradujo en un riesgo de seguridad para el régimen de Maduro», por lo que se activó el plan de exterminio de las disidencias de las FARC.

El objetivo del ELN es mantener a Maduro en el poder para seguir haciendo negocios

El objetivo del ELN es mantener a Maduro en el poder para seguir haciendo negocios con el tráfico de drogas y la explotación ilegal de oro, diamantes y coltán; por eso, y debido a su lealtad y eficiencia, lo convirtió en un grupo armado que le hace «trabajos sucios» al gobierno, en el narcotráfico, en la protección de sitios vulnerables, incluido el Arco Minero del Orinoco.

No olvidemos que, a través de Venezuela se trafica cerca del 50 % de la cocaína producida en Colombia, lo cual equivale al 71 % de lo que se consume en el mundo, dirigida principalmente hacia los Estados UnidosRepública DominicanaCentroamérica y España, entre otros países.

Al respecto, se afirma que un alto mando de la fuerza pública en Colombia, publicó extractos de un plan que el ELN elaboró, según el cual: «Nuestra estrategia debe contemplar posibles escenarios de contrarrevolución producidos por una invasión militar norteamericana o un golpe de Estado en Venezuela. Defender la revolución bolivariana de Venezuela en caso de una agresión violenta por parte del imperialismo».

Tomemos en cuenta que el propio Diosdado Cabello se apersonó el pasado miércoles 22 de enero, en la región del Catatumbo y contribuyó al despliegue de los llamados ejercicios militares del Escudo Bolivariano 2025 en el que participaron numerosos miembros de las Fuerzas Armadas Bolivarianos y también civiles. Además, declaró que: «usará todos los recursos para frustrar cualquier levantamiento, hacer respetar a Venezuela de los grupos generadores de violencia, de los terroristas armados de Colombia (…) y de toda la gente que amenace y pretenda agredir a Venezuela». Tampoco olvidemos la muy reciente reunión del ministro de Defensa Padrino López con su homólogo de Colombia.

El panorama es poco alentador para Colombia y hay preocupación en el más alto nivel del Estado por lo que suceda en los próximos días, pues puede profundizar los peligros para la seguridad nacional de Colombia.

El Gobierno colombiano y su inteligencia comprobaron que hubo apoyo venezolano desde su territorio, y eso solo pudo ser posible con la complacencia de la dictadura; además, la fuerza pública colombiana, producto del debilitamiento de la institución militar y de seguridad interna que Petro causó, enfrenta enormes desafíos debido a la insuficiencia de talento humano y recursos materiales que limita seriamente su capacidad operativa.

Mientras tanto, el gobierno de Petro sigue eludiendo hablar del papel del gobierno venezolano en el asunto, pese a que, desde el pasado 15 de noviembre, la Defensoría del Pueblo había emitido una alerta de inminencia sobre una posible arremetida del ELN ante una ruptura con las disidencias de las FARC en la zona.

De acuerdo con funcionarios de las fuerzas militares, el testimonio de líderes sociales, uno de los alcaldes de Norte de Santander y de los propios líderes de las FARC, el refuerzo que recibió el ELN llegó por la frontera con Venezuela con meses de anticipación.

Lo más crítico de la situación es que esta violencia parece que no cesará y que Colombia está entrando en una nueva espiral de violencia alimentada por esta guerra entre el ELN y las FARC, con el apoyo del gobierno venezolano, pues el frente colombiano es percibido como su principal amenaza; eso, además, podría dar al traste con el único proyecto del gobierno de Petro, la «Paz Total», ya que ahora, depende de la dictadura venezolana.

WP Twitter Auto Publish Powered By : XYZScripts.com
Scroll to Top
Scroll to Top