La semana pasada, el fiscal general Tarek William Saab dijo que Roberto Deniz y Ewald Scharfenberg son parte del caso “PDVSA Crypto”, donde su oficina está arrojando a todos los que el gobierno de Maduro quiere castigar, al decir que esos periodistas de investigación son nada menos que operadores de propaganda para Tarek El Aissami.
Por: Rafael Osío Cabrices – Caracas Chronicles
Deniz y Scharfenberg son dos de los fundadores de Armando.Info y, de hecho, han publicado investigaciones contra el ex ministro de Petróleo que cayó en desgracia. La acusación tiene el absurdo de muchos otros cargos creados por un poder judicial diseñado para demostrar quién está a cargo. Pero esta vez es fácil pensar por qué Saab ataca, una vez más, a periodistas que fueron empujados al exilio hace años y han sido sometidos a una sistemática guerra sucia de vitriolo y persecución judicial.
Anoche, PBS estrenó en Estados Unidos e Internet A Dangerous Assignment: Uncovering Corruption in Maduro’s Venezuela, un documental sobre la investigación de Armando.Info sobre Alex Saab.
La película está muy bien hecha y, al exponer esta historia con tanta granularidad, demuestra lo valiosa que es como estudio de caso sobre la perversión de la institucionalidad venezolana en manos de Maduro y compañía.
Se puede ver, como nunca antes, lo malos que eran los primeros productos CLAP subsidiados , y hasta dónde llegó el equipo liderado por Roberto Deniz para demostrarlo buscando la ayuda de investigadores en alimentos del laboratorio de nutrición de la Universidad Central. La película muestra cómo el gobierno jugó con el hambre de las masas, vendiendo leche falsa que dejó un sedimento inquietante que las mamás denunciaron a través de videos en las redes sociales. Y cómo enriquecieron a unos cuantos contratando viviendas sociales para miles que nunca se terminaron, y acabaron como cementerios de edificios a medio construir en Valencia.
En el centro de todo esto ha estado Alex Saab. Quebrado tras el fracaso de su negocio textil en Barranquilla, Saab (no relacionado con el fiscal general) encontró el camino hacia la élite chavista a través de la senadora colombiana Piedad Córdoba, amiga íntima de Hugo Chávez, y utilizó ese acceso para enriquecerse con un Socio experto en operaciones turbias: un ex narcotraficante que ahora vivía en Venezuela con una nueva identidad. A partir de entonces, Saab siguió convirtiéndose en el hombre providencial de Maduro durante el colapso financiero de la nación y el aislamiento parcial de su gobierno.
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