Morfema Press

Es lo que es

La ideología izquierdista y ‘progre’ destruye el Ejército de EEUU

Comparte en

Lo hemos tratado ya otra veces aquí, cuando tratábamos de las dificultades del Pentágono para cumplir sus expectativas de reclutamiento: el Ejército norteamericano, la maquinaria de guerra más poderosa del mundo a gran distancia de la segunda, se está convirtiendo en un campo de pruebas de ingeniería social para las más enloquecidas teorías «woke», dañando profundamente su capacidad bélica.

Por: La Gaceta de la Iberosfera

Pero ahora no lo decimos nosotros, sino un demoledor informe preparado por los legisladores republicanos, que en las pasadas elecciones de medio mandato se hicieron con el control de la Cámara de Representantes.

Los legisladores republicanos han criticado a la Administración Biden por políticas que, según dicen, están debilitando a las fuerzas armadas de Estados Unidos a través del adoctrinamiento izquierdista y las posturas ideológicas «woke» para contentar a los «conciliábulos de profesores universitarios o expertos progresistas».

El informe, redactado por el senador republicano por Florida Marco Rubio y por el diputado por Texas Chip Roy, va de frente, desde el título: «Guerreros woke». «El propósito específico de nuestro Ejército es ‘proporcionar una defensa común’ de nuestra nación. No se puede convertir en un experimento social de izquierda. No puede usarse como un garrote contra Estados Unidos mismo», señalan en el informe. «Desgraciadamente, el presidente Joe Biden y su Administración están debilitando a los combatientes de Estados Unidos centrándose en la virtud ‘woke’».

El documento desciende a los detalles, citando ejemplos recientes muy ilustrativos, como la primera iniciativa del secretario de Defensa, Lloyd Austin, tras su confirmación en el Senado, que consistió en firmar una nota sobre el «racismo» entre las tropas. El mensaje ordenaba a todos los militares y empleados civiles del Departamento de Defensa dedicar un día a debatir el problema de las posturas «extremistas» en el Ejército, a pesar de que los propios datos del Pentágono solo pudieron encontrar un centenar de casos de «posturas extremistas» entre más de 2,1 millones de miembros activos y de reserva.

Otro ejemplo fue el de Bishop Garrison, hoy asesor de Austin sobre temas de capital humano y diversidad, equidad e inclusión. Garrison promovió el «Proyecto 1619», la versión histórica según la cual el país mismo se había fundado sobre la esclavitud y la explotación racista y que, en definitiva, es un error. Esta desmolarizadora versión de toda la historia de Estados Unidos se ha enseñado en todos los colegios del país y se sigue enseñando en muchos de ellos.

También cita el informe el caso de Kelisa Wing, directora de diversidad, equidad e inclusión de la Agencia de Educación del Departamento de Defensa. «Wing escribió un libro para enseñar a los niños blancos que tienen el privilegio blanco y que ‘el privilegio blanco perjudica a mucha gente’. El libro viene con un ejercicio para ayudar a los niños a comprender ‘qué partes de mi identidad me han proporcionado privilegios’».

Capítulo aparte merece el desbarajuste de género que, aplicado al Ejército, está dando frutos esperpénticos, sobre todo porque el Ejército de Estados Unidos, como los de cualquier otro país, históricamente rechazaba aquellos candidatos que no cumplieran ciertos criterios físicos y psicológicos bastante estrictos. Uno no puede entrar en las Fuerzas Armadas si tiene determinadas alergias comunes, por ejemplo, y tampoco con trastornos del aprendizaje, depresión aguda o ansiedad y enfermedades de la piel como el eccema y psoriasis. En cambio ahora, denuncia el informe, no solo se aceptan, sino que «se promueven y celebran con orgullo procedimientos de reasignación de sexo, que pueden tener períodos de recuperación de meses, y la recuperación completa toma ‘hasta un año’ para algunos procedimientos».

El Departamento de Defensa del expresidente Barack Obama permitió en 2016 el acceso sin restricciones al servicio militar por parte de personas transgénero. El informe del Partido Republicano argumenta que las personas con disforia de género sufren problemas de salud mental y tienen más probabilidades de experimentar ansiedad severa y problemas de salud mental, y «tienen ocho veces más probabilidades de suicidarse». «El mundo es un lugar peligroso», recuerda el informe. «Y la locura de la Administración Biden está erosionando nuestra mayor fuente de seguridad».

WP Twitter Auto Publish Powered By : XYZScripts.com
Scroll to Top
Scroll to Top