Pete Hegseth, secretario de Guerra de EEUU, ha anunciado este jueves la puesta en marcha de la Operación Lanza del Sur, con el objetivo de redoblar la ofensiva en el Caribe tras la incorporación del mayor portaaviones del mundo, el Gerald Ford, al despliegue estadounidense.
«Esta misión defiende nuestra patria, expulsa a los narcoterroristas de nuestro hemisferio y protege a nuestra patria de las drogas que están matando a nuestra gente. El hemisferio occidental es la vecindad de Estados Unidos, y la protegeremos», aseguró el funcionario en sus redes sociales.
El anuncio de la administración Trump sucede horas después de que la cadena de televisión CBS anunciase que las fuerzas estadounidenses lanzaron el pasado lunes el ataque número 20 contra los cárteles del narco. Un funcionario del Pentágono confirmó que cuatro personas murieron tras destruir la supuesta narcolancha en el Caribe. Desde que comenzaran los ataques a principios de septiembre, 20 embarcaciones y un submarino fueron hundidos con ataques de misiles, lo que le costó la vida a 79 presuntos narcotraficantes, 48 en el Caribe y 31 en el Pacífico. Sólo dos de los tripulantes, un ecuatoriano y un colombiano, lograron sobrevivir.
Washington relaciona estas barcas con distintos cárteles y organizaciones declaradas terroristas, como el Cártel de los Soles, el Tren de Aragua (mafia transnacional venezolana) o la guerrilla colombiana del Ejército de Liberación Nacional (ELN), estrecha aliada del chavismo. Al frente de los Soles estaría el propio Maduro, según Washington. Por su «cabeza» se ofrecen 50 millones de dólares, la misma cantidad que se adjudicó para atrapar a Osama bin Laden tras los atentados de las Torres Gemelas.


