Morfema Press

Es lo que es

Los primeros 100 días de Meloni: Ajuste fiscal, rebaja de impuestos y liberalización del mercado laboral

Comparte en

Vía Derecha Diario

La máxima referente de la derecha italiana y Presidente del Consejo de Ministros, Giorgia Meloni, demostró la suficiente capacidad política como para llevar a cabo reformas estructurales en tiempo récord.

Solo en sus primeros 100 días al frente del Gobierno italiano, Meloni logró sacar adelante una profunda reforma laboral para flexibilizar y modernizar la legislación vigente, cumplió con sus promesas para simplificar el sistema tributario y volverlo más eficiente, y anunció nuevas medidas para recortar el peso del gasto público sobre el total de la economía.

La rápida acción política de Meloni la llevó a consolidarse como la mandataria más popular de Europa, y patrocinar una aplastante victoria electoral de la derecha en las elecciones regionales de 2023.

Ajuste fiscal y ordenamiento de las cuentas públicas

El Gobierno fijó el objetivo para llegar a un déficit financiero total no superior al 3,7% del PBI para el año 2024, una cifra consistente con el equilibrio primario una vez descontados los intereses de deuda. El sendero fiscal trazado por Meloni garantiza la sostenibilidad del ratio de la deuda pública, que para el caso italiano se perfila como uno de los más elevados de la Unión Europea.

Meloni confirmó la suspensión hacia adelante de los “Super-bonos” que el Estado otorgaba para subsidiar el crédito inmobiliario por parte de los bancos, así como la financiación para numerosos programas de obras públicas y privadas.

Significaba un agujero fiscal equivalente a los 2.000 euros por ciudadano. Esta medida se había extendido como una emergencia durante los años más afectados por la pandemia, pero en pleno 2023 prima la necesidad de ordenar las finanzas públicas y estabilizar los precios.

El recorte patrocinado por Meloni fue especialmente recomendado por la misma Unión Europea, ya que el alza de las tasas de interés del BCE está impactando directamente sobre las tasas activas del sistema financiero, y este costo financiero se traslada inmediatamente a los subsidios al crédito que otorgaba el Estado italiano. 

La reforma tributaria

El Presupuesto 2023 incluye una reducción de la carga fiscal para trabajadores autónomos y trabajadores por cuenta propia. Sobre estas dos categorías, Italia dejará de aplicar el gravámen sobre el impuesto a la renta tradicional y en su lugar aplica dos impuestos fijos: 15% para autónomos y 5% sobre los bonos de productividad cuando se trate de cuentapropistas.

Involucra una reducción impositiva equivalente a los 4.500 millones de euros, con alivios tributarios especialmente concentrados en personas con ingresos iguales o inferiores a los 35.000 euros anuales. 

Pero el Gobierno de Meloni pretende avanzar todavía más, y dispone de una nueva reforma sobre la estructura del IRPF (el análogo del impuesto a las Ganancias en Italia). Hasta ahora, el Gobierno había logrado reducir la cantidad de alícuotas de 5 a 4 para el año fiscal 2022, por lo que la tasa promedio del IRPF se redujo del 34,4% al 31,5%. 

Italia aplicaba los siguientes gravámenes:23% para ingresos anuales de hasta 15.000 euros, 25% entre 15.000 y 28.000, 35% entre 28.000 y 50.000, y 43% para todos los ingresos superiores a los 50.000 euros anuales. 

La reforma Meloni para 2023 simplifica el sistema todavía más, y lo reduce a solo 3 alícuotas. La más elevada seguirá en el 43% para ingresos superiores a 50.000 euros anuales (no se verán cambios sobre las personas de mayores ingresos), se aplicará una alícuota del 27% para ingresos de entre 15.000 y menos de 50.000 euros anuales, y 23% para los ingresos inferiores (una vez descontadas las debidas deducciones). La tasa promedio general del IRPF se reducirá al 31% a partir de 2023.

Liberalización laboral

El Gobierno recortará las prestaciones sociales en subsidios por desocupación, persiguiendo dos objetivos fundamentales: garantizar la disciplina fiscal y evitar alentar el paso de población desde la actividad hacia el sector pasivo. 

El NASPI italiano (la prestación por desempleo) actualmente cada persona desempleada por un período de 2 años recibe una prestación por la mitad de las semanas trabajadas en los cuatro años anteriores. La reforma Melonio pretende reducir este umbral del 50% al 40% en una primera instancia, y más tarde al 30%. Se incentiva activamente la vuelta al mercado laboral

Asimismo, se lanzó la desregulación de los contratos de duración determinada. La legislación actual limita esta serie de contratos a una serie de situaciones específicas. Meloni pretende cancelar los motivos por los cuales se puedan celebrar estos contratos, dejando estos criterios a la libre iniciativa del sector privado sin restricciones.

También se estipuló aumentar la cantidad máxima de meses permitidos para la determinación de este tipo de contratos flexibles, de los 24 actuales hasta los 36, en línea con otras legislaciones laborales más competitivas en el mundo y Europa.

Reactivación económica

El incipiente clima de reformas comienza a impactar en las expectativas para la economía financiera y real de Italia. La media de estimaciones para el crecimiento del PBI trimestral esperan un fuerte repunte hacia la segunda mitad del año 2023. La previsión del crecimiento proyectada por el FMI sigue siendo modesta, pero aumentó del 0,1% al 0,8%.

Por otra parte, se espera que el diferencial de tasas de interés entre los bonos italianos y los bonos de referencia alemanes (activos de confianza por excelencia) se reduzca por lo menos un 27% en comparación al nivel observado en octubre del año pasado. Se trata de una métrica similar al índice de Riesgo País, pero considerando a Alemania como referencia y no a Estados Unidos. 

La baja del riesgo crediticio del país permitirá el desembolso de un monto por 190.000 millones de euros desde la Unión Europea, a fin de poder continuar con la refinanciación ordenada de las obligaciones del sector público.

WP Twitter Auto Publish Powered By : XYZScripts.com
Scroll to Top
Scroll to Top