Vía Zero Hedge
El primer ministro húngaro, Viktor Orban, quien ha defendido ferozmente las fronteras, el idioma y la cultura de su país, pronunció un discurso de 30 minutos ante una multitud de miles de admiradores estadounidenses en Dallas el jueves en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC).
Pintó una imagen de Estados Unidos y Hungría enfrentando frentes gemelos en una lucha contra el liberalismo, los globalistas, los comunistas y las «noticias falsas»
«Occidente está en guerra consigo mismo», dijo, y agregó: «Todos los globalistas pueden irse al infierno. He venido a Texas».
«Ya puedo ver los titulares de mañana: el hombre fuerte racista y antisemita europeo de extrema derecha, el caballo de Troya de Putin, pronuncia un discurso en la conferencia conservadora «, dijo, entre aplausos y risas. “No querían que estuviera aquí e hicieron todo lo posible para abrir una brecha entre nosotros. Me odian y me calumnian a mí y a mi país como te odian a ti y te calumnian a ti ”, continuó Orban.
Orban también criticó la inmigración ilegal y dijo: «Para detener la inmigración ilegal, en realidad hemos construido ese muro», y agregó que su gobierno pudo «reducir la inmigración ilegal a cero».
Luego, Orban discutió la importancia de la familia y el rechazo de la ideología de género, diciendo que necesitamos «construir un muro alrededor de nuestros hijos» para protegerlos contra las personas que los atacan.
«Para resumir, la madre es una mujer, el padre es un hombre, y dejen a nuestros hijos en paz. ¡Punto final, fin de la discusión!»
Luego dijo que necesitamos «menos drag queens y más Chuck Norris», entre fuertes aplausos.
«Estas dos ubicaciones definirán los dos frentes en la batalla que se libra por la civilización occidental», dijo, y agregó: «Hoy no tenemos ninguno de ellos todavía. Necesitamos ambos. Tienes dos años para prepararte «.
