Casi una veintena de familiares de detenidos en una cárcel ubicada en el norte de Venezuela realizaron este jueves una vigilia cerca del centro penitenciario para exigir la libertad “inmediata” de sus parientes y del resto de los “presos políticos” que -denuncian- hay en el país.
En las inmediaciones de la prisión de Tocorón, en el estado Aragua, se concentraron principalmente mujeres para pedir también el cese de la “persecución”, que opositores aseguran arreció tras las presidenciales del pasado 28 de julio, en las que el mandatario Nicolás Maduro fue proclamado ganador por el ente electoral, un resultado tachado de fraudulento por el antichavismo mayoritario.
Los manifestantes, que tenían papeles con los rostros y nombres de detenidos, encendieron decenas de velas blancas con las que formaron en el piso la palabra ‘libertad’, y también pusieron carteles con mensajes como “Navidad sin presos políticos en Tocorón”.
Una de ellas, Sonia Mujica, dijo que las madres están unidas “en oración por la pronta libertad” de sus hijos, a los que calificó como “presos políticos del Estado”, según un video compartido en la red social X por ONG.
Otra de las mujeres que se encontraban en el lugar y que habló en el video, aunque no se identificó, expresó también que están unidos “todos los familiares de los presos políticos recluidos en el centro penitenciario de Tocorón en un solo sentir, principalmente, pidiéndole a Dios” la “pronta liberación” de sus allegados.
Ese centro penitenciario, además del conocido como Tocuyito (estado Carabobo), fue intervenido el año pasado por el Gobierno en un operativo contra bandas criminales que operaban desde estas y otras prisiones del país, entre ellas, el ‘Tren de Aragua’.
Esas dos cárceles fueron convertidas este año en centros de reclusión de “máxima seguridad” para encerrar a “todos los guarimberos (manifestantes violentos)”, según dijo el jefe de Estado el pasado agosto, luego de que se desataran múltiples protestas contra el resultado oficial de los comicios que dejaron, según cifras oficiales, más de 2.400 detenidos y 27 muertes.
El régimen venezolano responsabiliza a los manifestantes -a quienes vincula con la Plataforma Unitaria de oposición- de generar “violencia” y “vandalismo” en varias sedes públicas, mientras que el bloque antichavista acusa de “represión” a los agentes de seguridad del Estado en las protestas.
La ONG Foro Penal computa un total de 1.958 presos por razones “políticas” -la gran mayoría detenidos tras las elecciones-, de los cuales 69 son menores de edad, con edades de 14 a 17 años, siempre según la ONG.