Entre rumores, desesperación y largas filas, se acerca un aumento de gasolina por parte del gobierno venezolano, en su afán de compensar la pérdida de ingresos por la reducción en la producción petrolera y sostener el flujo de divisas, según reseña La Voce d´ Italia.
Aunque no se ha hecho el anuncio oficial, Pdvsa ya notificó a los operadores privados sobre el incremento de 50% en el precio de venta del combustible.
La decisión del gobierno se enmarca en la reducción significativa en los ingresos por la paralización de operaciones de empresas petroleras extranjeras, incluyendo a Chevron, por lo que el aumento hará que el litro de gasolina pase de 0,50 a 0,75 dólares y se aplicaría en todo el territorio nacional.
La incertidumbre entre la población ocasionó este fin de semana colas nerviosas en las estaciones de servicios, pues no se descarta que el ajuste sea un primer paso para ir eliminado el subsidio de combustible a los venezolanos.
Las decisiones del gobierno buscan de forma desesperada compensar la salida de Chevron y la menor demanda de petrolero venezolano, a la que se suman las sanciones de Estados Unidos y las medidas que limitan a las trasnacionales petroleras en el país.
