Vía El Diario
¿Quién dijo que la agricultura es solo para hombres?”, cuestionó la empresaria y comunicadora social Génesis Olivia, quien decidió romper con esta barrera al trabajar en la agroindustria del maíz
Antes de seguir con el legado de su familia, Oliva estudió Comunicación Social en la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), y realizó dos másteres en Suiza y EE UU para fusionar lo mejor de su carrera con la agroalimentación. En uno de sus trabajos finales presentó AgroWomen, una idea que marcaría la diferencia en la tradición familiar.
Este proyecto consiste en visibilizar y empoderar a las mujeres que trabajan en la producción y distribución de la agroindustria del país, además de conectar con otras mujeres en todo el mundo para brindarles una plataforma en la que compartan historias y experiencias en el rubro.
Al mismo tiempo, AgroWomen busca fomentar la transparencia en la cadena alimentaria para permitir a los venezolanos conocer de cerca el origen y el proceso de producción de sus alimentos.
De Venezuela al Foro Mundial de la Alimentación
La fundadora de AgroWomen participó por primera vez en el Foro Mundial de la Alimentación 2024 (WFF), en la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés) en Roma, Italia.
“Buena alimentación para todos, hoy y mañana”, es el nombre que recibió el programa en 2024. Esta red mundial reúne a expertos, gobiernos y organizaciones para discutir y buscar soluciones a los desafíos que enfrenta la alimentación. Desde la seguridad alimentaria y la nutrición hasta el cambio climático y la sostenibilidad.
También se presentan las últimas innovaciones del sector, se comparten experiencias de éxito y se establecen políticas para garantizar que todos tengan acceso a alimentos saludables y suficientes.
Para participar en el foro, Oliva aplicó a través de los canales oficiales como sociedad civil, aportando su experiencia como productora venezolana sin formar parte de ninguna delegación oficial. “Si trabajas en la producción de alimentos se puede aplicar para participar, con meses de anticipación y al acreditarte hay meses de trabajo previo a través de reuniones”, explicó la empresaria venezolana.
El rol de la mujer en el sector rural
En 2023, una encuesta de la organización Mujer Rural y Derecho a la Tierra de América Latina y del Caribe reveló que las mujeres agricultoras venezolanas enfrentan múltiples desafíos, incluyendo la falta de financiamiento, insumos, capacitación y servicios básicos como agua y electricidad. Estas condiciones limitan su producción y calidad de vida.
Un informe de la FAO reveló que las mujeres en los sistemas agroalimentarios suelen tener trabajos menos seguros y peor pagados que los hombres. A escala mundial, ellas reciben un promedio de 82 centavos por cada dólar que gana un hombre en el mismo sector. Además, sus trabajos tienden a ser más informales, temporales y físicamente demandantes.
No solo es una industria para hombres
Los primeros desafíos que enfrentó Génesis Oliva al comenzar con este proyecto fueron “los prejuicios sociales”, debido a que es una industria desigual en cuanto a la participación de hombres y mujeres. También se debatió entre quedarse en territorio venezolano o emigrar a otro país.
De acuerdo con un informe de la FAO, las acciones para reducir las desigualdades de género en la agricultura tienen un impacto directo en la seguridad alimentaria, el crecimiento económico y la resiliencia de las comunidades ante diversas crisis, incluyendo el cambio climático y la pandemia.
“Las mujeres venezolanas podemos desarrollar la autoconfianza suficiente para creer en nuestras capacidades y atrevernos a hacer las cosas distintas”, expresó Oliva. “Y confiar que, en ti, están los recursos y las fortalezas para vencer cualquier miedo y levantarte las veces que sean necesarias”, agregó.
Pioneras de la ciencia agrícola
En los últimos siglos, numerosas mujeres han realizado descubrimientos científicos que han transformado la agricultura en todo el mundo. Algunas de las más destacadas son:
-Barbara McClintock: estudió los cromosomas del maíz, sentando las bases para la ingeniería genética en plantas.
-María Sibylla Merian: fue pionera en el estudio de los insectos y su relación con las plantas, contribuyendo a la comprensión de los ecosistemas agrícolas.
-Harriet Williams Russell Strong: su labor como conservacionista del agua fue importante para la gestión sostenible de este recurso en la agricultura.
-Mary Engle Pennington: desarrolló métodos para refrigerar y transportar alimentos y reducir el desperdicio.
Su participación en el foro refleja la fortaleza de AgroWomen para romper barreras y reafirmar que el trabajo de las mujeres en la agroindustria es fundamental para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y garantizar una seguridad alimentaria global.
Oliva enfatizó que el carácter innovador, resiliente y familiar de este proyecto representa una inversión en el futuro para asegurar que las próximas generaciones de mujeres tengan las herramientas necesarias para liderar la transformación de los sistemas alimentarios.