Vía 20 Minutos
Fuentes judiciales han informado de que el teléfono móvil del atacante de la vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, habría sido bloqueado en los intentos de la Policía Federal de extraer información, por lo que se considera que la «prueba fundamental» está en riesgo de perderse, según ha podido saber la agencia Télam.
El teléfono que llevaba el atacante, Fernando Andrés Sabag Montiel, la noche en la que intentó disparar a Fernández de Kirchner en la cabeza habría sido formateado, por lo que la Justicia podría perder una prueba clave.
Según han podido saber los medios locales, en la pantalla del móvil habría aparecido el mensaje «teléfono reseteado de fábrica».
Por ello, la Policía Federal habría pedido a la Policía de Seguridad Aeroportuaria que investigase el dispositivo, debido a que poseen un software más moderno con el objetivo de tratar de acceder a la información.
Este inconveniente mantiene en vilo a los investigadores, sin embargo, desde el juzgado a cargo -liderado por María Eugenia Capuchetti- ha manifestado confianza en que la cadena de custodia no fue vulnerada.
Además, las autoridades han descartado que el teléfono haya sido manipulado de forma remota, ya que «permaneció en modo avión», recoge Télam.