Vía DDC
En 2023, la nación vecina contrató 80 sanitarias cubanas para aliviar la grave escasez de profesionales. Otras 200 arribarán en 2024
El régimen de Cuba acordó enviar 200 enfermeras a Guyana, que se sumarían a las decenas que meses atrás fueron exportadas a ese país, informó el Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) de la Isla.
De acuerdo con una breve nota oficial, esos profesionales fueron solicitados por Georgetown, que pidió «ampliar el número de profesionales de la salud en la especialidad de enfermería debido a la necesidad de trabajadores de ese sector que enfrenta el hermano país caribeño».
Según el MINREX, en 2023 la nación vecina contrató 80 enfermeras cubanas y, de acuerdo con las declaraciones del ministro de Salud guyanés, Frank Anthony, otras 200 arribarán a inicios de 2024.
«Cuba continuará fortaleciendo la cooperación médica internacional con el propósito de salvar y mejorar la calidad de vida del pueblo guyanés», concluyó la nota, que como es habitual, evitó mencionar cuánto cobrará La Habana por la exportación de esas profesionales, que junto con los médicos especialistas, escasean en el sistema sanitario cubano.
En julio pasado, el Ministerio de Salud de Guyana firmó un nuevo Acuerdo de Cooperación Médica con La Habana, aunque hasta la fecha poco se ha dicho sobre los detalles del negocio.
Según el medio Caribbean National Weekly, la petición de Georgetown se debe a «la acuciante escasez de profesionales de la salud», y busca abordar «el desgaste de las enfermeras y la creciente carga de trabajo dentro del sistema de salud».
El reporte indica que las profesionales cubanas serán sometidas a «un curso intensivo de tres meses de duración» para que dominen el inglés, lengua oficial en Guyana.
De acuerdo con el medio, la Corporación del Hospital Público de Georgetown ha estado lidiando con un déficit sustancial de enfermeras, estimado en aproximadamente 600, lo que afecta gravemente la calidad de la atención al paciente.
El director ejecutivo de la institución de salud, Robbie Rambarran, aseguró que en 2022 unas 107 enfermeras renunciaron a sus puestos. Reconoció que en la actualidad muchas se ven sobrecargadas con tareas no clínicas, como el movimiento de objetos dentro de los centros sanitarios.
El Gobierno guyanés reconoce la necesidad apremiante de ampliar la fuerza laboral de atención médica a medida que se embarca en la construcción de nuevos hospitales e instalaciones en todo el país. Parte de esta estrategia implica el aumento de los salarios y la ampliación de los programas de formación para atraer y retener a los profesionales sanitarios.
Por el momento, 1.100 personas están recibiendo formación en enfermería en el país, y se prevé contratar entre 1.000 y 1.200 personas más para su formación en el próximo año.
La exportación de enfermeras cubanas se produce cuando Guyana enfrenta las amenazas de Venezuela, país con el que tiene un conflicto histórico a causa de la disputa por el extenso territorio fronterizo del Esequibo. Precisamente en ese país trabajan desde tiempos de Hugo Chávez cientos de sanitarios cubanos, entre otros profesionales exportados por La Habana.
El régimen cubano exporta toda clase de profesionales a decenas de países del mundo, en lo que denomina «misiones internacionalistas» movidas por la solidaridad, cuando en verdad se trata de un negocio que reporta al Gobierno tantos ingresos como el turismo.
La mayor parte de los trabajadores exportados son médicos, otro grupo profesional escaso en Cuba, que sufre una crisis humanitaria más que evidente, con el deterioro de los servicios de salud y la grave escasez de medicamentos e insumos hospitalarios de todo tipo.
La contratación de profesionales cubanos en el exterior se hace a través de instancias oficiales, que se quedan con la mayor parte del salario (entre el 70 y el 75%) que los países de destino pagan a cada exportado. Relatores de derechos humanos de Naciones Unidas y varias organizaciones internacionales advierten que ello podría calificar como esclavitud moderna y trata de personas.