Vía NTN 24

Diversos análisis advierten que lo que viene después del 10 de enero será peor si Maduro sigue en el poder, y es lo que el régimen pretende

En apenas unos días, la diferencia entre el dólar paralelo y el dólar oficial se incrementó de manera alarmante, trayendo como consecuencia la devaluación del bolívar y la inflación.

Octubre ha sido el mes más oscuro para el tipo cambiario y todo parece indicar que empeorará en los días por venir, especialmente el 10 de enero cuando Maduro se ratifique el poder tras informar unos resultados que la oposición declara como «fraudulentos».

El exdirectivo del Banco Central de Venezuela, José Guerra, hoy perseguido político, apuntó que los ciudadanos están siendo sometidos a una «tragedia» con la devaluación del bolívar.

«La devaluación en octubre fue agresiva, más de 15 por ciento el aumento del dólar. En noviembre sigue la tendencia a la depreciación porque los venezolanos no confían en la política monetaria que sigue el BCV, menos en el gobierno ilegítimo irreconocido de Maduro», lo que a su juicio crea «un ambiente de desconfianza hoy y a futuro».

Más a futuro que hoy, recalca, «porque el 10 de enero va a ser una fecha clave, esta desconfianza se origina en la inconsistencia de la política económica, el BCV y el gobierno expandieron el gasto y la liquidez y eso fue en contra de los dólares y terminó en una depreciación que se sigue transfiriendo a los precios de los bienes, y la inflación ha venido de manera creciente».

Lo que al mismo tiempo ha pulverizado el salario. «No estamos refiriendo a un salario mínimo que está en 2,50 dólares al mes, el más bajo del planeta y con tendencia a la caída y el regimen. El régimen se niega a aumentarlo. Esta devaluación está arruinando más aún a los venezolanos y la perspectiva no parece ser buena porque mientras Maduro siga aferrado al poder no hay solución al problema».

Entretanto el dirigente político Henrique Capriles, advirtió que sigue la devaluación del Bolívar. «Pasó el tipo de cambio BCV de 36 a 44 bolívares por dólar en unos días. Para millones de venezolanos que tienen pensión y salarios en bolívares es un golpe muy duro. La inflación subiendo y el costo de la vida también. Parece que el único beneficiado con esto es el Estado. Son los que reciben las divisas de la renta petrolera».

El régimen inyectó al BCV 180 millones de dólares con el propósito de frenar el alza mientras los precios de los bienes y servicios siguen en aumento.