Vía VOA

La posibilidad de bloquear TikTok empezó en 2020, durante la presidencia de Donald Trump. Ya en ese entonces se cuestionaban los supuestos riesgos de seguridad cibernética que plantea la aplicación. La amenaza de su cierre terminó en 2021, cuando Joe Biden llegó al poder y anuló la propuesta de su antecesor.

Pero ahora se vuelve al punto de partida. A finales de febrero, la Casa Blanca dio un plazo de 30 días a las agencias del gobierno y 90 para los contratistas federales para asegurarse que nadie tiene instalado TikTok en dispositivos como teléfonos o tabletas.

El Departamento de Estado, al igual que el Departamento de Seguridad Nacional y el de Defensa ya habían bloqueado la popular plataforma china después de que varios informes de inteligencia aseguraran que se podría espiar a través de TikTok.

“Hemos visto casos serios de aplicaciones que dicen que hacen una cosa, pero lo que hacen es utilizar diferentes técnicas para obtener información personal de tu teléfono”, explica a la Voz de América el experto en tecnología y presentador del espacio “Vida Digital” Alex Neuman.

Algunas investigaciones hablan también del riesgo de los algoritmos, que promoverían el odio y la radicalización.

“Están diseñados para captar esa atención y para aprovechar el hecho de que el ser humano se siente más atraído por las cosas que lo polarizan”, agrega.

Mientras tanto, el gobierno de China dice que Estados Unidos está exagerando, que es una simple red social y que no hay motivo de preocupación.

“El gobierno de EEUU debe respetar con seriedad los principios de una economía de mercado y una competencia leal, y dejar de suprimir sin razón a las empresas relevantes”, manifestó Mao Ning, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores del gobierno de China.

Pero lo cierto es que TikTok está cada vez está más acorralada en Estados Unidos. Algunos medios en Estados Unidos señalaban que desde la Casa Blanca se pide que ByteDance, la empresa china propietaria de la red social, que venda sus participaciones o de la contrario la plataforma podría quedar bloqueada en el país. Sería la primera vez que el Gobierno manda un mensaje tan rotundo en este asunto, aunque públicamente nadie lo confirma.

La presión también viene por el Congreso. Varios senadores de ambos partidos han presentado un proyecto de ley que autorizaría al Secretario de Comercio a controlar los productos tecnológicos que podrían suponer una amenaza, como sería el caso de TikTok.

“Hay varias cosas que me preocupan de TikTok. La primera son los datos, la segunda el control que tienen del algoritmo y la tercera la amplia influencia”, remarcó Paul Nakasone, Director Agencia Seguridad Nacional de EEUU durante una audiencia especial ante el Congreso.

El gobierno de China, por su parte, sigue defendiendo a TikTok y asegura que no hay pruebas que confirmen que la red social es una amenaza para la seguridad de Estados Unidos.

“Estados Unidos debe dejar de difundir información falsa sobre el tema de la seguridad de los datos y deben proporcionar un entorno comercial, abierto y no discriminatorio”, recalcó Wang Wenbin, otro portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China.

La situación habría llegado hasta tal límite que TikTok está valorando separarse de los propietarios chinos para asegurar su operación en Estados Unidos. Hasta ahora siempre habían rechazado esa medida.