El principal índice de la Bolsa de Tokio, el Nikkei, se desplomó un 12,40 % este lunes, la segunda mayor caída porcentual de su historia arrastrado por el fortalecimiento del yen tras la última subida de tipos del Banco de Japón (BoJ), y el temor a una recesión en EE.UU.
El Nikkei, que agrupa a los 225 títulos más representativos del mercado, cerró con un descenso del 12,40 % ó 4.451,28 puntos, hasta los 31.458,42 enteros.
El Topix, que incluye a las firmas de la sección principal, las de mayor capitalización, retrocedió un similar 12,23 % ó 310,45 puntos, hasta las 2.227,15 unidades.
De esta forma, el Nikkei encajó su mayor descenso porcentual desde el “Black Monday” (lunes negro), el 20 de octubre de 1987, cuando se depreció un 14,90 %, y también su mayor caída en puntos de la historia, al sobrepasar los 3.836,48, también de ese día.
Una caída de más del 25% en tres semanas
El índice alcanzó los 42.426,77 puntos el pasado 11 de julio y marcó entonces su récord histórico, espoleado por la continuada depreciación del yen. Desde entonces, el selectivo referencial acumula una caída del 25,5 %, y 10.765,60 puntos.
El parqué tokiota abrió fuertemente a la baja siguiendo la misma tónica de la semana pasada, cuando cerró el viernes con una caída cercana al 6 % y después de varias jornadas de pérdidas tras la última reunión del BoJ.
El cambio en la política monetaria nipona amplificó el efecto de los temores a una desaceleración económica en EE.UU. tras unos datos de empleo mucho peor de lo esperado que desataron las especulaciones de un aumento del ritmo del recorte de tipos de interés en el país norteamericano, lo que deparó fuertes caídas también en otras bolsas asiáticas en este inicio de semana.
Consecuencias negativas para las exportaciones
La citada subida de tipos del BoJ, que reduce las diferencias entre esta entidad y otras como la Reserva Federal estadounidense y el Banco Central Europeo, desencadenó una fuerte apreciación del yen frente al euro y al dólar, una tendencia que perjudica a los grandes exportadores nipones al repatriar sus beneficios en el exterior.
El yen se movía hoy durante las negociaciones en Tokio entre los 141,68 y los 146,63 yenes por dólar. Frente al euro, la divisa japonesa se apreció también y se movía en la franja de las 154,39 y las 160,13 unidades.
“El valor en la Bolsa se decide por varios factores como la situación económica y las actividades empresariales, por lo que evitamos hacer comentarios sobre los movimientos diarios”, dijo hoy el portavoz gubernamental japonés, Yoshimasa Hayashi, en una rueda de prensa.
Hayashi señaló, no obstante, que el Ejecutivo japonés, vigilará estos movimientos y “hará un esfuerzo en administrar la economía y finanzas” niponas.
Sólo 14 valores cotizan al alza
Mitsubishi UFJ, uno de los principales bancos japoneses, fue la empresa más negociada del día y se desplomó un 17,84 %, seguido de las empresas del sector de los semiconductores Lasertec y Tokyo Electron, que perdieron un 14,26 % y un 18,48 %, respectivamente.
Las acciones de Toyota Motor retrocedieron hoy un 13,65 %, tras presentar la semana pasada sus resultados financieros para abril-junio que reflejaban un descenso de sus ventas, así como una previsión de beneficio neto para el ejercicio en curso con una caída cercana al 30 %.
Mientras, el conglomerado tecnológico y de inversión Softbank se dejó un 18,65 % y Fast Retailing, propietaria de la cadena de ropa Uniqlo, bajó un 9,59 %.
En la sección principal, 14 valores subieron frente a los 1.626 que retrocedieron y a los 3 que cerraron sin cambios.
El volumen de negociación ascendió a 7,96 billones de yenes (51.398 millones de euros).
Japón pide calma y confianza en su economía
El Gobierno nipón, por su parte, envió un mensaje de calma tras el desplome bursátil de este lunes en el mercado tokiota.
El Ejecutivo está “vigilando con atención y mucho interés la caída de la Bolsa”, dijo el ministro de Finanzas japonés, Shunichi Suzuki, horas después del batacazo, que según los analistas estuvo motivado por el agudo fortalecimiento del yen, que se movía hoy entre 141,68 y 146,63 unidades por dólar.
Esta notable apreciación se produce tras la decisión la semana pasada del Bando de Japón (BoJ) de acometer su segunda subida de tipos de interés de referencia en lo que va de año, hasta situarla en el 0,25 %, y los temores a una recesión en Estados Unidos, tras sus datos más recientes de empleo, mucho peores de lo esperado.
Esto ha desatado expectativas de que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) acelere el ritmo de sus previstos recortes de tasas, lo que acortaría la distancia de las políticas monetarias de ambas potencias, una brecha que viene siendo, de hecho, el principal factor de la apreciación del yen frente al dólar en años recientes.
“Es deseable que el yen se mueva de forma estable según los fundamentos y vamos a vigilar de cerca el mercado de divisas”, tomando las decisiones oportunas “con calma”, aseguró el responsable financiero nipón a este respecto.
EFE