Mis impresiones sobre por qué María Corina insiste en la «ruta electoral» pese a que evidentemente no hay opciones de unas elecciones transparentes en Venezuela con la dictadura chavista.

ESTA ES MI OPINIÓN, SOLO ESO.

Desde hace décadas sabemos que el chavismo no saldrá del poder con votos: se han robado las instituciones, han apresado, torturado y asesinado opositores, y la verdad, a estas alturas, les interesa muy poco lo que piense la comunidad internacional, solo les interesa seguir ocupando el poder porque todos ellos saben que, de caer, terminarán pasando el resto de sus días en una cárcel, sino es que antes alguien se toma la justicia por sus manos y acaba con sus vidas.

El chavismo (o sus jerarcas) a estas alturas ya no luchan por el poder per se, luchan por sus vidas, ellos son también presos del régimen, no tienen a donde ir, tienen dinero pero fuera de Venezuela no pueden gastarlo, son unas parias, y además, son repudiados por el 90 % de los venezolanos, es de la gente más odiada en el planeta tierra, sin poder, para ellos sería mejor morir.

Ahora, en el 2019 tuvimos la mejor oportunidad de acabar con el chavismo, teníamos gobiernos aliados, a Trump amenazando (bien sea por bluff o porque realmente tenía intenciones) de programar una operación militar para deponer a quienes usurpan el poder; sin embargo, en ese entonces tuvimos una oposición mediocre o colaboracionista, eso lo determinará cada quien, que prefirió escuchar a sus aliados de izquierda internacional y una vez más, como siempre sucede, terminaban negociando con el régimen y dándoles aire.

La verdad es que el escenario de María Corina en 2024 es muy diferente al de Guaidó en 2019. Machado se encuentra rodeada de gobiernos aliados a Maduro, dispuestos a matar por Maduro y ocultar sus cadáveres si es necesario, no puede ni salir de Venezuela por avión y mucho menos por las fronteras terrestres, y por si fuera poco, tiene en EEUU a la Administración más cómplice con el chavismo que ha existido en estos 25 años (Biden).

María Corina no cuenta HOY con el reconocimiento de los países del mundo como si lo contó Guaidó, tampoco tiene un aliado en EEUU que ha demostrado estar de su lado y dispuesto a protegerla, mucho menos un grupo paramilitar a sus órdenes, por eso, sus únicas herramientas son movilizar a la población y llamar al voto (aunque estoy muy seguro que ella sabe que eso de votar no va a funcionar).

¿Entonces, qué busca? María Corina ganó unas elecciones completamente legítimas en la que más de dos millones de venezolanos le votaron, es nuestra representante legítima ante el mundo. El chavismo, una vez más va a desarrollar unas «elecciones» dictatoriales, es decir, van a volver a decir que Maduro ganó en un simulacro sin oposición, y eso va a darle al mundo los recursos jurídicos para desconocer nuevamente al régimen y darle reconocimiento a Machado.

En noviembre hay elecciones en Estados Unidos y las probabilidades de que Trump vuelva al poder son altas, se rumora que incluso Marco Rubio podría acompañarlo como vicepresidente, esto cambiaría por completo las reglas del juego y podría brindar a la oposición en Venezuela recursos (de poder, negociación e incluso amenaza) para hacerte frente a la tiranía más sanguinaría que ha tenido Venezuela.

Y bien, ¿nosotros qué podemos hacer? Acompañarla, solo eso, mostrar nuestro apoyo. Es importante entender que en este momento ni ella, ni nosotros, contamos con ningún otro tipo de herramienta de resistencia contra la tiranía, por tanto, solo podemos agruparnos a su alrededor y seguir empujando, rezando para que ocurra un cambio electoral en el resto de la región que nos permita sacar a estos asesinos del poder.

Les insisto que todo esto es solo mi opinión, no es algo que haya conversado con ella o su equipo.

Cuidemos a María Corina, miren que, estar allí dando la cara por más de 30 millones de venezolanos, luego de tantos años, ya es de por sí algo completamente admirable.