Vía Libertad Digital
Las autoridades norcoreanas han confirmado el ensayo del lanzamiento del misil balístico ‘Hwasong 17’, un arma que podría llegar a EEUU.
Las autoridades norcoreanas han confirmado que su «líder supremo», Kim Jong-un, presenció este jueves el ensayo del lanzamiento del misil balístico intercontinental ‘Hwasong 17’, un arma con un posible alcance de unos 15.000 kilómetros (podría llegar a EEUU).
Se trata de la primera prueba de este tipo desde 2017 y el momento se inmortalizó en un vídeo al más puro estilo Hollywood que se emitió este jueves en la televisión estatal norcoreana
La presentadora Ri Chung-hee, encargada siempre de radiar las noticias más importantes para el régimen, explicó, luciendo un traje tradicional rosado, que las Fuerzas Estratégicas norcoreanas lanzaron con éxito a modo de prueba el misil desde el aeropuerto internacional de Sunan en Pionyang.
A lo Tom Cruise
Su introducción dio paso a un montaje acompañado de música de suspense y segmentos en cámara lenta en el que puede verse al líder Kim Jong-un y a dos de las figuras clave en el programa de misiles, el director de la Academia Nacional de Ciencias de la Defensa, Jang Chang-ha, y el vicedirector del Departamento de Maquinaria, Kim Jong-sik, sincronizando sus relojes para sacar el misil del hangar.
A continuación se muestra el despliegue del enorme misil, que se cree es el de mayor longitud del mundo (se calcula que tiene unos 23 metros, más que los misiles rusos, chinos o estadounidense que gozan de ese tipo de alcance).
Comienza una cuenta atrás que finaliza con al grito de «¡manse! (exclamación originada en la corte imperial china y usada en Asia nororiental que puede traducirse por «¡larga vida!»)
El despegue desde la plataforma erectora móvil de once ejes se repite una y otra vez en el vídeo desde diferentes ángulos (incluyendo una toma a gran altura con un dron) y ofrece imágenes tomadas desde una cámara instalada en el misil y de lo que parece ser el desacoplamiento exitoso de la primera fase del proyectil antes de dar paso a las celebraciones de Kim y el resto del personal militar.