Via MIT Technology Review
La invasión de Ucrania ha llevado a los militares a actualizar sus arsenales, y Silicon Valley está listo para sacar provecho.
Exactamente dos semanas después de que Rusia invadiera Ucrania en febrero, Alexander Karp, director ejecutivo de la empresa de análisis de datos Palantir, hizo su presentación a los líderes europeos.
Con la guerra a la vuelta de la esquina, los europeos deberían modernizar sus arsenales con la ayuda de Silicon Valley, argumentó en una carta abierta.
Los militares están respondiendo a la llamada. La OTAN anunció el 30 de junio que está creando un fondo de innovación de mil millones de dólares que invertirá en nuevas empresas en etapa inicial y fondos de capital de riesgo que desarrollen tecnologías «prioritarias», mientras que el Reino Unido ha lanzado una nueva estrategia de inteligencia artificial específicamente para la defensa, y los alemanes han destinado poco menos de medio billón para investigación e IA.
La guerra en Ucrania ha agregado urgencia al impulso para impulsar más herramientas de inteligencia artificial en el campo de batalla.
Los que tienen más que ganar son las nuevas empresas como Palantir, que esperan sacar provecho de la carrera militar para actualizar sus arsenales con las últimas tecnologías.
Pero las preocupaciones éticas de larga data sobre el uso de la IA en la guerra se han vuelto más urgentes a medida que la tecnología se vuelve más y más avanzada, mientras que la perspectiva de restricciones y regulaciones que rijan su uso parece tan remota como siempre