El ministro de Exteriores israelí, Eli Cohen, ha anunciado la retirada de los representantes diplomáticos de su país de Ankara, en aparente reacción al discurso del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, que hoy comparó los bombardeos israelíes sobre Gaza con el holocausto judío y las bombas atómicas de la II Guerra Mundial, atribuyendo todo a la mentalidad de «Occidente».

«Vistas las graves declaraciones que llegan desde Turquía, he ordenado el regreso de los representantes diplomáticos allí para llevar a cabo una reevaluación de las relaciones entre Israel y Turquía», escribió Cohen en la red X, antes Twitter.

El martes pasado, Erdogan había declarado que Hamás, la organización islamista que domina Gaza y que hace tres semanas lanzó un ataque contra Israel «no es una organización terrorista sino un grupo de luchadores por la libertad».

El objetivo de Israel es desmantelar Hamás, proteger sus fronteras y retornar las personas secuestradas y militares capturados, desde el pasado 7 de octubre cuando inició la guerra. Así lo aseguró Daniel Hagari, portavoz del Ejército de Israel, luego de informar que sus tropas ampliaron sus incursiones terrestres en la Franja de Gaza este sábado 28 de octubre.

AFP