Jorge G. Castañeda afirma que ‘sin la cooperación cubana’ no se logrará una solución pacífica para la crisis política de Venezuela.
El excanciller de México Jorge G. Castañeda advirtió que un contingente del régimen cubano impide que se produzca un levantamiento militar contra Nicolás Maduro y que, sin la ayuda de La Habana, será imposible lograr una solución pacífica para la crisis política desatada en Venezuela tras las elecciones del 28 de julio, en una entrevista con el medio argentino Infobae.
El ahora profesor de la Universidad de Nueva York afirmó que el contingente funciona como una especie de «guardia pretoriana» cubana, que protege al dirigente chavista, proclamado vencedor en los últimos comicios por el oficialista Consejo Nacional Electoral (CNE), que no presentó las actas que validaran dicho resultado.
«Estamos ante una situación casi nunca vista en la historia reciente, en la que una parte importante del aparato de seguridad e inteligencia de un país proviene de otro, en este caso, Cuba. Esta fuerza actúa como una especie de ‘guardia pretoriana’, que es común en muchos gobiernos del mundo, democráticos o no. Sin embargo, en este caso, lo extraordinario es que esa guardia es extranjera, y su función es garantizar que el ejército venezolano no derroque a Maduro», explicó Castañeda, quien fue secretario de Relaciones Exteriores entre 2000 y 2003, y se convirtió en el primer canciller mexicano que votó contra La Habana en la Comisión de Derechos Humanos de la Organización de Estados Americanos (OEA). Esto generó una tensión entre los Gobiernos de los dos países.
Sobre cómo logra ese contingente cubano evitar un golpe militar contra Maduro, Castañeda explicó que «el ejército venezolano está bajo constante vigilancia, fiscalización e intervención por parte del aparato de inteligencia cubano, que es de una enorme competencia».
«Es gente muy, muy buena», aseguró sobre el aparato de inteligencia del régimen. «Han evitado cualquier intento de derrocamiento de Fidel o Raúl Castro durante 65 años, y quién sabe cuántos intentos de asesinato de uno u otro. Son muy buenos en lo que hacen. Además, estos cubanos son 100% leales a (el régimen de) Cuba. No a Maduro, a (el régimen de) Cuba», aclaró.
«Mientras (el régimen de) Cuba decida apoyar a Maduro, ellos harán todo lo necesario para mantenerlo en el poder», afirmó.
«Esto no ocurre con un ejército o aparato de seguridad que no sea extranjero. Los ejércitos nacionales, incluidos generales, coroneles o tenientes, responden en muchas ocasiones a las demandas de la sociedad o de poderes fácticos. Esto ha ocurrido muchas veces en América Latina y otras partes del mundo. Si alguien quisiera influir, para derrocar a un líder, podría hacerlo, pero en este caso, la presencia de los cubanos neutraliza cualquier influencia externa», señaló.
«Sin embargo, no es solo eso. Pensemos en el empresariado, la sociedad civil, la clase media e incluso en las clases populares, que tienen una incidencia en los ejércitos. En Venezuela, un coronel encargado de la seguridad en un barrio popular podría llegar a su casa y escuchar a su esposa quejarse porque no hay comida, papel higiénico, pasta de dientes o medicamentos para su hijo enfermo. Esta presión familiar puede tener un impacto en las decisiones de los militares. Pero esa dinámica no existe en el caso del contingente cubano, porque la esposa de esos oficiales cubanos no está en Venezuela. Está en Cuba», argumentó el también comentarista en medios mexicanos e internacionales.
Ante la pregunta de si los gobiernos de Estados Unidos, México, Colombia y Brasil deberían buscar la cooperación cubana para una solución pacífica en Venezuela, el excanciller mexicano respondió que «sin la cooperación cubana es imposible».
Respecto a lo que podría incentivar al régimen de Cuba a colaborar, señaló la normalización de las relaciones entre La Habana y Washington.
«Una normalización con Estados Unidos. Según los cubanos —aunque a mí no me consta— el desastre que están viviendo se debe a la intensificación de las sanciones, el ‘bloqueo’, como lo llaman ellos, y la limitación de las remesas. Si todo eso es cierto y la situación en Cuba es tan catastrófica como dicen, ahí está el incentivo», sostuvo Castañeda.