Nicolás Maduro, dijo este lunes que aún considera «prematuro» hablar sobre su «eventual candidatura» a las elecciones presidenciales, previstas para este año, pero aseguró que el pueblo «va a dar una nueva lección a los imperios» y a la «derecha oligárquica».
«Es prematuro todavía. Apenas el año empieza. Solo Dios sabe, no Diosdado, Dios (…) Esperemos que se definan los escenarios electorales del proceso que va a haber este año, (…) y estoy seguro que, con la bendición de Dios, tomaremos la mejor decisión», dijo el jefe de Estado en una entrevista con el intelectual franco-español Ignacio Ramonet, transmitida por el canal VTV.
En todo caso, en la «decisión» sobre su «eventual candidatura», aseguró, «nunca» estarán «por delante ni ambiciones personalistas ni individualistas ni ego ni sangre azul», pero sí «los intereses de la patria».
«Y cuando se tome la decisión, sea la que sea, saldremos todos a conquistar. Lo que sí puedo decir hoy (…) es que, en 2024, el pueblo de Venezuela le va a dar una nueva lección a los imperios del mundo, a la derecha oligárquica, a los extremistas, que no olvidarán durante décadas», dijo.
En este sentido, afirmó que las «fuerzas populares» venezolanas «se preparan para una gran victoria electoral y para que venga un nuevo tiempo de revolución», con los «proyectos históricos» dejados -señaló- por el fallecido Hugo Chávez.
«El 2024 será un año de grandes triunfos», agregó el mandatario.
En los últimos meses, Maduro ha repetido en actos y encuentros oficialistas una nueva consiga de cara a las presidenciales en la que expresan que «el que va (a estas elecciones) es Nicolás».
Además, el pasado septiembre, el primer vicepresidente de la formación y considerado número dos del chavismo, Diosdado Cabello, dijo que esperan a que «haya elecciones para que Nicolás Maduro siga siendo el presidente de todos los venezolanos».
El país tiene previsto celebrar las presidenciales en el segundo semestre, como acordaron el chavismo y la oposición mayoritaria, reunida en la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), en octubre, cuando firmaron un acuerdo sobre la «promoción de derechos políticos y garantías electorales para todos», que contempla, entre otros puntos, la observación internacional.
El grueso de la oposición asegura que trabajará «cada día» de 2024 para lograr la «victoria electoral» de su candidata, María Corina Machado, sobre quien pesa una inhabilitación para ocupar cargos públicos de elección popular.
Machado, que asegura que nunca ha sido notificada de inhabilitación alguna, pidió en diciembre al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) revisar su caso, haciendo uso de un mecanismo acordado entre el Gobierno y la PUD en el marco de las negociaciones.
La exdiputada liberal arrasó en las primarias opositoras del 22 de octubre, cuando recibió el 92,35 % de los votos.
EFE