Vía Criptonoticias

La novena edición del evento MIT Bitcoin Expo se inició este sábado 7 de mayo con una charla de Michael Saylor, CEO de MicroStrategy, quien se ha destacado como evangelista de bitcoin, al punto que ha convertido a esa firma en la primera compañía pública con más BTC almacenados como parte de su reserva de tesorería.

Saylor sostuvo una conversación con Chris Keshian, director de activos digitales en NeoFlow Asset Management, en la que abordó la tesis de Bitcoin como energía digital. Saylor explicó que, a pesar de la explosión de la difusión de información digital en las últimas décadas, no todos los datos que se transmiten se pueden considerar energía.

«Si se transmite una copia digital de la sexta sinfonía de Beethoven de Nueva York a Tokio, esta no serviría para comprar un edificio. En el supuesto negado de que ocurriera esa venta, que violaría las leyes de la física, el costo del edificio subiría un millón de veces. A esto se le llama inflación», afirmó Saylor.

En cambio, si se transfieren las llaves privadas que dan acceso a mil millones de dólares en bitcoin, el destinario en Tokio si puede adquirir, ya no un edificio, sino una manzana completa, afirmó Saylor. «Se trata de energía política. Y esto se logra a través de un exchange. La energía política es simplemente un fluido, otro medio, en este caso, la moneda».

Los mineros de Bitcoin están apoyando la producción de energía sostenible en todas partes. Los mineros son simplemente centros de datos que producen energía digital prístina. La acción correcta es comprar bitcoin o comenzar a minarlo ahora.

Michael Saylor, CEO de MicroStrategy.

Así como el destinatario de los fondos en bitcoin puede convertirlos en bienes y servicios, el remitente de los mismos pierde esa capacidad. Uno de los mayores logros de Bitcoin, enfatiza Saylor, es que logró evitar el doble gasto. Otro logro importante es que su transferencia se realiza en una red de pares (P2P), sin la intervención de un tercero de confianza.

Cuando se piensa en Bitcoin como energía, esta se mueve a baja frecuencia en la capa de base, dice el especialista. Con esto, Saylor se refiere al relativo bajo número de transacciones de Bitcoin. Sin embargo, viendo el panorama en general, el ejecutivo enfatiza: «En la segunda capa, Lightning Network, la frecuencia aumenta considerablemente».

En este sentido, considera que hay un campo de gran potencial para desarrollar aplicaciones para la segunda capa de Bitcoin, e incluso para otras capas que puedan desarrollarse en lo sucesivo. De esta manera, destaca que, para los programadores de Bitcoin, este es un tiempo ideal para el desarrollo de aplicaciones de seguridad, o innovadoras aplicaciones en Twitter que permitan, por ejemplo, enviar dinero al destinatario de mensajes directos.

Dólar vs. bitcoin como reserva de tesorería

Saylor sostiene que MicroStrategy comenzó a adquirir bitcoin como parte de su reserva estratégica en agosto de 2020, convirtiéndose en una medida defensiva ante la política monetaria expansiva de la reserva federal estadounidense. «La expansión de la moneda implica una necesaria reducción de la energía por cada unidad monetaria. Es similar a expandir al doble el área de una habitación, manteniendo la misma cantidad de oxígeno. Esto llevaría a una bajada drástica de la temperatura», sostiene el ejecutivo.

En términos de retorno, la inflación anual implica que, si una empresa tiene 1.000 millones de dólares de reserva de tesorería, estaría perdiendo entre 150 y 200 millones de dólares por año, asevera Saylor. Una estrategia alterna sería pedir prestado y tener un capital de trabajo negativo que se deriva de la deuda, pero si se paga un interés fijo, la devaluación de la moneda puede operar a favor de la empresa, señala.

Hay cierta perversidad en tener la capacidad de obtener préstamos de elevadas cantidades de dinero. «Si pido prestado 10.000 millones de dólares al 3% y la oferta monetaria se expande 15%, mi empresa estaría ganando 120 millones de dólares al año sin hacer nada» acota Saylor.

De la iniciativa de invertir en bitcoin como una práctica defensiva, Saylor reconoce que la fase siguiente fue oportunista. «Suscribimos una deuda de USD 650 millones de dólares al 1% y compramos bitcoin. Significaba adoptar posiciones en corto para el dólar y posiciones en largo para bitcoin, lo cual se veía como una buena idea».

Luego, las adquisiciones de bitcoin pasaron a formar parte de la estrategia de la empresa, pues el siguiente préstamo para comprar bitcoin fue por 1.000 millones de dólares. «Pasamos de un reflejo, a una oportunidad, luego a una estrategia en torno a bitcoin, y estamos convencidos de que se trata de algo más profundo, de una ideología», asevera el ejecutivo.

Finalmente, Saylor aborda las críticas a Bitcoin porque supuestamente consume mucha energía. En respuesta a esto, asegura que los críticos del protocolo de Prueba de Trabajo no entienden que se trata de una transformación de la energía. «Cualquier token que se produzca sin gastos en energía no tendría ningún valor», sentencia Saylor. Bajo esta óptica, el hecho de que se trabaje (gaste energía) para generar más valor es lo que hace a Bitcoin valioso.