Vía AFP
Los principales países productores de petróleo iniciaron este domingo su reunión, en la cual es probable que mantengan sus niveles actuales de producción, en la víspera de que entren en vigor nuevas sanciones contra Rusia.
Los representantes de los trece miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), y de sus 10 aliados — entre los que figura Rusia –, se reunieron por videoconferencia poco antes de las 11H00 GMT para discusiones técnicas, antes de una reunión ministerial prevista una hora después.
El contexto es especialmente agitado: Rusia está indignada contra la decisión de la Unión Europea, el G7 y Australia de limitar el precio de su petróleo, que entrará en vigor el lunes “o poco tiempo después”.
También el lunes comenzará el embargo de la UE sobre las entregas marítimas de crudo ruso. Este impedirá los envíos de crudo ruso en buques cisterna a la UE, que representan dos tercios de las importaciones, lo que reduciría las arcas de Rusia para la guerra en Ucrania en miles de millones de euros.
Aunque el sábado Rusia denunció el tope de precio de 60 dólares y amenazó con suspender las entregas a cualquier país que adoptara la medida, Ucrania sugirió que el tope establecido debió ser todavía más bajo.
Para la OPEP+, la gran incógnita sobre el petróleo es qué tan fuerte será el impacto de las sanciones sobre el suministro ruso.
“La incertidumbre sobre el suministro ruso es significativa”, consideran analistas de DNB. Por ello, la OPEP “le apuntaría a una reunión de bajo perfil que no cambie las cuotas de producción existentes”.
Una ‘posición incómoda’
La amenaza de Moscú de suspender las entregas a los países que adopten el tope de precio pondría a “algunos de ellos en una posición muy incómoda”, dice el analista de Oanda, Craig Erlam: la de “elegir entre perder acceso a petróleo ruso barato o enfrentar sanciones del G7”.
Elegir una reunión virtual de la OPEP+ y no una presencial en la sede de Viena sugiere un cambio en la política, opina el analista de UniCredit Edward Moya.
Sin embargo, aún no se puede descartar que haya “recortes más profundos de la producción de petróleo” en esta etapa.
Entre el pesimismo económico impulsado por la vertiginosa inflación y los temores de una demanda de energía más débil por parte de China debido a sus restricciones alrededor del covid, los dos petróleos de referencia en el mundo se mantuvieron cerca de su nivel más bajo del año, lejos de los picos de marzo.
Desde la más reciente reunión del grupo a comienzos de octubre, el petróleo Brent del Mar del Norte y el WTI han perdido más del 6% de su valor.
Sin embargo, los precios se impulsaron la semana pasada ante la especulación de que habría todavía un posible recorte de producción de la OPEP+.
“La OPEP+ podría sentirse forzada a adoptar una postura más agresiva” recortando o amenazando con reducir aún más la producción, dice Edoardo Campanella, analista de UniCredit.
“Rusia también podría tomar represalias a través de su influencia dentro de la Opep+ para impulsar futuros recortes de producción que exacerbarían la crisis energética mundial”, agregó.