Es de hace algún tiempo, pero merece la pena verlo, porque el tipo sigue en las mismas.
Y haciendo millones.
Fue José Luis Rodríguez Zapatero en 2004 quien sembró la semilla del guerracivilismo en la sociedad española y 16 años después, tras haberse dedicado con ahínco al pingüe negocio de apoyar a los torturados chavistas en Venezuela, parece haber enloquecido totalmente.
En sintonía con sus colegas, amigos o correligionarios Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, el ex presidente socialista y durante una década líder absoluto del PSOE llama a atacar a EEUU, montando a su alrededor una especie de ‘cinturón de hierro‘.
Y lo hizo, histérico, durante una entrevista concedida a Telesur, la cadena del dictador Nicolás Maduro.
«Tenemos que hacer que China y ojalá la Unión Europea, muchos trabajamos en esta dirección, pongan a Estados Unidos en una situación imposible».
La entrevista, realizada telemáticamente desde su chalet en el lujoso barrio madrileño de Valdemarín, que ahora ha dejado por una mansión se superlujo en ‘La Finca’, tuvo lugar en mayo de 2020, cuando la pandemia de coronavirus más arreciaba en Norteamérica y al tiempo que se producía el V Encuentro del Grupo de Puebla.
El Grupo de Puebla, una organización que agrupa a líderes de la izquierda mundial más sectaria, socialista y comunista y a ‘progres‘ de todo pelaje, se formó en julio del 2019 para reemplazar al Foro de Sao Paulo, un ente que tras la muerte de Fidel Castro y Hugo Chávez habría perdido su protagonismo en el continente.
Una treintena de personajes de 10 países, casi todos de la catadura de Zapatero o Maduro, forman el núcleo esencial del grupo, cuyo mayor anhelo, acorde con lo expresado por ellos mismos, es ‘adueñarse del mañana‘ y frenar el ‘avance de la derecha conservadora’.
Presentan a EEUU como el ‘Imperio del Mal‘ que se debe combatir, y a Latinoamérica como la región sobre la que hay que enfocar una “estrategia” contra gobiernos de derecha y centroderecha.
En su videollamada con Telesur, un excitado Zapatero menciona como objetivo a batir el ‘America First‘, la política implementada por el presidente Donald Trump, quien promueve con énfasis la necesidad de impulsar la “prosperidad estadounidense”.
Zapatero, férreo defensor de los regímenes dictatoriales de Cuba y Venezuela, llama a los integrantes del Grupo de Puebla a hablar con los ‘demócratas‘ de EEUU para crear ‘un frente‘ en este país.
UNA BANDA QUE APESTA A CORRUPCIÓN
En la página web del Grupo de Puebla se puede leer:
“Nuestra región experimenta una nueva ola de gobiernos neoliberales, que insisten en promover los intereses y privilegios de una élite socioeconómica, a costillas del desarrollo de nuestros pueblos, frustrando sus posibilidades de desarrollo y bienestar social”.
Luiz Inácio Lula da Silva, expresidente brasileño que asimismo forma parte del mencionado grupo, sigue vinculado a las investigaciones por uno de los mayores escándalos de corrupción que ha tenido lugar en el continente debido a las sobornos que entregó la firma Odebrecht a titulares de gobiernos y funcionarios de alto rango. Por ese caso, el antiguo dirigente sindical brasileño habría recibido más de 4 millones de dólares.
Otro de los miembros del Grupo de Puebla es el expresidente colombiano Ernesto Samper, quien vio tambalear su gestión al frente del Palacio de Nariño, entre 1994 y 1998, por la comprobada infiltración de ‘dineros calientes’ del extinto Cartel de Cali a su campaña política. El exmandatario solo pidió “disculpas” por ese hecho 25 años más tarde.
En el Grupo de Puebla también participa el presidente de Argentina, Alberto Fernández, el único mandatario en ejercicio que tiene esa colectividad, que es ficha del kirchnerismo, un movimiento que lidera la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien ocupa el cargo de vicepresidenta y sobre la que pesan investigaciones por corrupción.
Siempre me pareció Zapatero un hombre poco dotado intelectualmente.
No sabía que era un desequilibrado, está de psiquiátrico. Sinceramente.— YO MISMO 🇪🇸 (@YOMISMO81614384) June 6, 2020
«El Grupo de Puebla se hace más que necesario en estos momentos», defendió Zapatero, que también pidió que Estados Unidos levantara los embargos económicos a los gobiernos de Venezuela y Cuba:
«Se ha negado por parte de Estados Unidos, y nadie se ha interesado por parte de las organizaciones internacionales, de que pudiera haber un paréntesis humanitario con el tema de Venezuela y Cuba y sus bloqueos».