La investigación muestra el manejo del tema de la violencia de alta letalidad, el cumplimiento de los protocolos de necropsia y los tipos de armas utilizados por los grupos delictivos para cometer sus ilícitos -desde el análisis de expertos-, así como el marco legal que regula el uso de armas y municiones en Venezuela
Transparencia Venezuela, 24 de marzo de 2024. El incremento de la actividad criminal y de las economías ilícitas, registrado durante las dos últimas décadas en Venezuela, se ha caracterizado por la ejecución de delitos contra la vida con altos niveles de crueldad y con el uso de armas cada vez más sofisticadas. Luego de examinar las redes delictivas y las economías negras que operan a escala nacional y trasnacional, Transparencia Venezuela se aproxima al fenómeno desde otro ángulo, abordando la especialización de las técnicas y el armamento empleados por estos grupos en sus actividades.
Entre los principales hallazgos de Tecnología criminal en Venezuela, ¿cómo asesinan y qué armas usan los grupos delictivos? están la opacidad de los organismos públicos que se ocupan de la materia y la alta letalidad del tipo de armas en manos de los grupos delictivos que operan en el país. Al igual que en otros aspectos de la vida nacional, el informe muestra la inexistencia de datos y estadísticas, en este caso sobre los decesos ocasionados por los grupos criminales.
De acuerdo con el Informe Anual del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), en 2023 ocurrieron en el país 6.973 muertes violentas, de las cuales 1.956 fueron víctimas de homicidios en manos de delincuentes. De estas cifras se desprende que hubo un promedio de 581 fallecidos por mes como consecuencia de la violencia, lo que equivale a 134 por semana y 19 cada día.
Además, señala que en los estados fronterizos con Colombia (Zulia, Táchira, Apure y Amazonas), es donde se observa mayor presencia del crimen organizado en sus diversas formas: grupos guerrilleros, bandas criminales binacionales. En tanto que en el estado Bolívar la acción criminal está asociada a la actividad minera, y Sucre destaca por la violencia relacionada con el narcotráfico y la trata de personas.
Tecnología criminal en Venezuela, ¿cómo asesinan y que armas usan los grupos delictivos?, a partir de conceptos básicos sobre violencia, se exponen el tipo de heridas que predominan en los asaltos y agresiones, las armas utilizadas por los grupos delictivos, se refleja el nivel de crueldad empleada en la comisión de las actividades ilícitas y el grado de especialización del equipamiento de las organizaciones criminales. Ante la ausencia de estadísticas de acceso público sobre la materia, el estudio consultó la opinión de expertos, se hicieron visitas de campo y se realizó un registro de publicaciones de prensa desde enero de 2021 hasta octubre de 2023.
También se diseñó un instrumento que permitió recabar datos sobre la especialización de la violencia. La herramienta incluye aspectos como: aplicación de los protocolos de necropsia, cumplimiento de los estándares internacionales, dictámenes, registros y cantidades de heridas letales, región anatómica donde se localizan las heridas homicidas, y el tipo de arma utilizada, blanca o de fuego.
El informe evidencia que en el país se cumplen los protocolos de necropsia dentro de reglas básicas sin atender a patrones o ejemplos de buenas prácticas internacionales. Algunos de los expertos consultados consideran que existen carencias de carácter técnico y de recursos humanos especializados.
Guerra criminal
Otro de los hallazgos de Tecnología criminal en Venezuela, ¿cómo asesinan y que armas usan los grupos delictivos? tiene que ver con el armamento utilizado por las bandas criminales que operan en el país. Además de la información recabada mediante la aplicación del instrumento de recolección de datos, las visitas de campo y la opinión de los expertos, se revisaron 327 noticias publicadas entre enero de 2021 y octubre de 2023, de las cuales 51 referían decomiso de armas y asesinatos cometidos por organizaciones criminales.
Del arqueo se desprende que los crímenes se cometen, principalmente, con armas de fuego; en tanto que las armas blancas y contundentes son utilizadas con poca frecuencia, mientras el uso de objetos cortantes se ha incrementado en los últimos años. Asimismo, se identificó que el uso de explosivos, particularmente granadas y fusiles de asalto como armas letales, también ha experimentado un auge significativo.
Cabe preguntarse, cómo las armas de guerra van a parar a manos de grupos delictivos e irregulares, cuando el marco legal venezolano establece que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) es el único ente estatal autorizado para la gestión de armamento en el territorio nacional. Adicionalmente, la empresa estatal Compañía Anónima Venezolana de Industrias Militares (CAVIM), adscrita al Ministerio de la Defensa, es el único ente autorizado para comercializar las armas de fuego en el país, y controlar la producción, comercialización y distribución de las municiones.
A ellos se suman otros organismos reguladores, como el Servicio Nacional para el Desarme (Senades) y la Comisión Presidencial para el Control de Armas, Municiones y el Desarme, conformada por representantes de diferentes entes públicos y organizaciones civiles. Sin embargo, los grupos criminales que operan en Venezuela poseen armamento de guerra. ¿Están fallando los controles? o ¿existe complicidad de funcionarios corruptos?