El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó este domingo que está dispuesto a imponer nuevas sanciones contra Rusia, horas después de que Moscú lanzara el mayor bombardeo aéreo contra Ucrania desde el inicio de la guerra.
En declaraciones ante la Casa Blanca, el mandatario respondió “sí, lo estoy” cuando se le preguntó si contemplaba endurecer las medidas económicas contra el Kremlin, aunque no ofreció detalles sobre el alcance ni el cronograma de las posibles sanciones.
El ataque ruso, que incluyó más de 800 drones y 13 misiles, golpeó múltiples ciudades, entre ellas Kiev, donde al menos dos personas murieron —una de ellas un menor— y decenas resultaron heridas. Por primera vez desde el comienzo de la invasión, los bombardeos dañaron la sede del Gobierno ucraniano, provocando un incendio en los pisos superiores del edificio del Gabinete de Ministros.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, calificó el ataque como “un crimen consciente y un alargamiento de la guerra” y pidió a Washington que implemente de inmediato sanciones más duras contra Moscú. En un mensaje en Telegram, criticó que Estados Unidos haya advertido en varias ocasiones sobre posibles medidas sin materializarlas.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, declaró recientemente que “todas las opciones están sobre la mesa” y acusó a Vladimir Putin de incumplir sus compromisos tras la cumbre de Anchorage. Según las Fuerzas Aéreas de Ucrania, Rusia lanzó 810 drones kamikaze Shahed y varios misiles Iskander, de los cuales 747 drones y cuatro misiles fueron derribados, aunque otros lograron impactar en 33 localidades.
Las explosiones y fragmentos de los drones alcanzaron ciudades como Odesa, Zaporizhzhia, Dnipropetrovsk y Krivói Rog. En Kiev, el distrito de Sviatoshynskyi sufrió graves daños en un edificio residencial de nueve plantas.
La administración Trump ha mantenido hasta ahora cautela respecto a nuevas sanciones, con el argumento de preservar un canal abierto de negociación con Moscú. No obstante, el presidente ha reiterado que si Rusia se niega a avanzar hacia la paz, responderá con medidas económicas: “No será una guerra mundial, pero será una guerra económica”, dijo recientemente.
Mientras tanto, Zelensky insistió en la necesidad de implementar los compromisos adquiridos esta semana en París, donde 26 países se comprometieron a reforzar la seguridad de Ucrania con apoyo militar e incluso una posible misión internacional de tropas.
El ministro ucraniano de Exteriores, Andrí Sibiga, calificó los ataques como “una grave escalada” y denunció el “mayor cinismo” del Kremlin al intensificar su ofensiva en medio de los esfuerzos diplomáticos de Washington.
(Con información de AFP, EFE y AP)