Vía MIT Technology Review
Las infecciones de viruela del mono se están extendiendo por todo el mundo, con 62 casos confirmados hasta el momento y 55 sospechosos, según una base de datos compilada por investigadores de la Universidad de Oxford y la Escuela de Medicina de Harvard.
Estados Unidos informó ayer su primera infección en un hombre en Massachusetts, pero se han identificado casos en el Reino Unido, Europa, Canadá y Australia, lo que sugiere que el raro virus se está propagando fuera de las regiones de África a las que se ha limitado principalmente hasta ahora.
¿Qué es?
La viruela del mono es una infección viral que causa síntomas similares a los de la gripe, que incluyen fiebre y dolores, junto con una erupción cutánea con baches distintiva que puede causar picazón, según la OMS . Se puede contraer por contacto cercano prolongado con un animal o humano infectado. Está estrechamente relacionado con el virus que causa la viruela, pero es menos grave: la mayoría de las personas se recuperan en unas pocas semanas sin tratamiento. Sin embargo, todavía puede ser fatal.
Los orígenes de este brote en particular no están claros y los científicos están buscando pistas para explicar su propagación. El primer caso de este brote se informó en el Reino Unido, en una persona que había regresado recientemente de Nigeria, donde la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido cree que contrajo el virus.
¿Deberíamos estar preocupados?
Si bien el riesgo para el público sigue siendo muy bajo, a la OMS le preocupa que las personas puedan propagarlo sin saberlo a través del contacto con otros, ya que los casos más leves pueden pasar desapercibidos. También es posible que las personas más jóvenes que no han sido vacunadas contra la viruela mucho más letal, que fue erradicada a fines de la década de 1970, sean más susceptibles a su pariente, la viruela del mono.
Las vacunas contra la viruela tienen al menos un 85 % de eficacia para prevenir la viruela del simio, y EE. UU. ha almacenado suficientes vacunas contra la viruela para vacunar a toda la población. Sin embargo, ese es un paso drástico y puede no ser necesario si se puede contener con éxito el brote actual de viruela del simio. Esa es una prueba para la cooperación global que dependerá en gran medida de las lecciones aprendidas de covid.