Se han pegado a las carreteras, roto ventanas y retrasado a miles de frustrados viajeros.
Ahora Extinction Rebellion se ha comprometido a dejar las cerraduras y el pegamento en casa y dejar de usar temporalmente la interrupción pública como herramienta de protesta, porque «muy poco ha cambiado».
El grupo de protesta , que hace campaña por una acción radical del gobierno sobre el cambio climático, ha dicho que trabajará para “interrumpir el abuso de poder y el desequilibrio” en lugar de realizar protestas que frustren al público.
Cientos de sus activistas han sido arrestados después de bloquear el tráfico, encerrarse y pegarse entre sí y pintar con aerosol edificios pero, a pesar de sus esfuerzos, XR dijo que “muy poco ha cambiado: las emisiones continúan aumentando y nuestro planeta está muriendo a un ritmo acelerado”.
Los actos incluyen pegarse a las carreteras o a los aviones para bloquear el tráfico. Extinction Rebellion asegura haber tomado la «controvertida resolución de abandonar temporalmente la perturbación del espacio público como táctica principal» para 2023.
La organización reconoce «el poder de la disrupción para hacer sonar la alarma», pero afirma que es «necesario» evolucionar y dice querer, sobre todo, «perturbar el abuso de poder» presionando a la clase política para que ponga fin al uso de combustibles fósiles.
