«El Gran Reinicio es muy parecido al comunismo en cierto sentido. Un nombre para algo y un argumento para algo que es una completa mentira. Es una cortina de humo para sus verdaderas ambiciones».
En la edición del jueves de Human Events Daily, Jack Posobiec explicó la motivación detrás del impulso del Foro Económico Mundial (WEF) para forzar el Gran Reinicio en el mundo occidental.
Se cita a Klaus Schwab, director del Foro Económico Mundial, afirmando que China es «un modelo a seguir para muchos países» y que sería «un modelo muy atractivo para un buen número de países».
Posobiec comienza con la pregunta: «¿Qué les he dicho ahora durante todo un año sobre Klaus Schwab, el Foro Económico Mundial y sus planes para Occidente?»
«El Gran Reinicio es muy parecido al comunismo en cierto sentido», explica Posobiec, «un nombre para algo y un argumento para algo que es una completa mentira. Es una cortina de humo para sus verdaderas ambiciones».
«Así que te dirán que se trata de diversidad. Te dirán que se trata de igualdad. Te dirán que se trata del clima. Te dirán que se trata de cualquiera de estos otros dogmas de la sociedad moderna», dice, describiendo estas creencias como «cultos teológicos paganos».
«Adorar la igualdad, adorar la equidad, adorar el clima, que por cierto era adorar a la naturaleza», dice, «[estas cosas] han estado involucradas en el culto pagano durante milenios, desde los albores de la civilización».
Posobiec continúa explicando que al otorgarles poder a estos defensores elitistas del Gran Reinicio, se le hace creer que «cumplirá su propósito al servicio de su culto».
«Pero todo es mentira», continúa, «porque lo que quieren es… el concepto de gobierno total «.
«Lo vi tan a menudo [en Shanghái] que traíamos gente de Estados Unidos», recuerda. «Líderes empresariales… líderes políticos… líderes culturales… los traemos a todos».
«Les decíamos que nuestro objetivo declarado era que íbamos a hacer que China fuera más abierta y transparente», dice, «y que tal vez China se volvería más democrática y comenzaría a introducir más libertades políticas para la gente».
Posobiec trabajó para la Cámara de Comercio Estadounidense en Shanghái a mediados de la década de 2000, tiempo durante el cual aprendió mandarín con fluidez y viajó por todo el país.
“Es por eso que a China se le permitió ascender a la Organización Mundial del Comercio en 1999”, explica. «A China se le permitió hacer eso».
Termina y da la advertencia de que debemos prestar atención a lo que vendrá si nuestra complacencia e ingenuidad nos vencen y permitimos que el WEF siga adelante con su plan.
“Dijimos que China se volverá más abierta y libre políticamente. Pero ha sido exactamente lo contrario, ¿no? Ha sido exactamente lo contrario”, dice.