El suministro de alimentos del futuro es un tema de gran interés en nuestro mundo en constante cambio.
Con una población mundial en constante aumento y unos recursos naturales limitados, es esencial predecir cuál será la alimentación del futuro. En esta fotogalería exploramos las posibles tendencias alimentarias en 2050.
Desde la tecnología a la agricultura, descubriremos cómo influirán los avances científicos y la conciencia medioambiental en nuestra dieta y qué podremos encontrar en nuestros platos dentro de 30 años.
Falso plátano
Enset. Un pariente cercano del plátano, el o «falso plátano», es un alimento que sólo se consume en una parte de Etiopía. El fruto de esta planta es similar al plátano, pero a diferencia de la fruta conocida, no es comestible.
Lo que en cambio ha atraído la atención de los científicos son los tallos y raíces amiláceos, que pueden fermentarse y utilizarse para hacer gachas y pan.
Según las investigaciones, este alimento tiene potencial para alimentar a más de 100 millones de personas en un mundo cada vez más cálido.
Pandanus tectorius
Pandanus tectorius es una planta de la familia Pandanaceae, que crece en zonas costeras desde las islas del Pacífico hasta Filipinas.
En el sudeste asiático, las hojas se utilizan para aromatizar platos dulces y salados, mientras que el fruto puede comerse crudo o cocinado. Según los científicos, esta fruta parecida a la piña y sus hojas deberían utilizarse más.
De hecho, el árbol tolera condiciones duras, como la sequía, los fuertes vientos y la niebla salina, por lo que podría plantarse en casi cualquier parte del mundo, siempre que se utilice de forma sostenible, sin agotar los recursos para la población local.
Fonio
Otra categoría de alimentos que podríamos ver cada vez más en nuestras mesas son los cereales, de los que existen más de 10.000 especies.
Entre ellas, los científicos consideran fonio (Digitaria exilis) un posible alimento del futuro.
Utilizada para preparar cuscús, gachas y bebidas, esta planta tolera condiciones secas.
Tylosema esculentum
Entre los alimentos del futuro están las alubias, o legumbres, por la gran cantidad de proteínas y vitaminas del grupo B que contienen.
Estos alimentos son baratos y se adaptan a una gran variedad de entornos, desde las costas oceánicas hasta las laderas de las montañas.
Según los científicos, existen miles de especies de leguminosas, pero hasta ahora sólo se han utilizado unas pocas, incluidas las que aún son desconocidas.
Una de ellas es la judía morama (Tylosema esculentum). Cultivada en algunas zonas de Botsuana, Namibia y Sudáfrica, es el alimento básico de muchas poblaciones.