Por Tyler Durden en Zero Hedge
La conferencia anual del Foro Económico Mundial (WEF siglas en inglés) comenzó ayer en Davos, Suiza. Las élites mundiales aterrizaron en lujosos jets privados en los últimos días en aeropuertos alrededor de Davos para discutir importantes desafíos globales , como el cambio climático, a puerta cerrada.
«Los ricos y poderosos están llegando a Davos para discutir el clima y la desigualdad a puerta cerrada utilizando la forma de transporte más desigual y contaminante: los aviones privados», dijo Klara Maria Schenk, activista de transporte de la campaña de movilidad europea de Greenpeace, al sitio web de noticias Politics.co
Greenpeace International publicó un nuevo informe que mostró que 1.040 jets privados volaron desde y hacia los aeropuertos alrededor de Davos para la reunión del año pasado, lo que provocó que las emisiones de CO2 de los jets privados aumentaran cuatro veces más en comparación con el promedio semanal.
«Dado que el 80 % de la población mundial nunca ha volado, pero sufre las consecuencias de las emisiones de la aviación que dañan el clima, y que el WEF afirma estar comprometido con el objetivo climático de París de 1,5 °C, esta bonanza anual de aviones privados es una desagradable clase magistral de hipocresía. Los aviones privados deben quedar relegados a la historia si queremos tener un futuro verde, justo y seguro para todos. Los llamados líderes mundiales deben predicar con el ejemplo y prohibir los aviones privados y los inútiles vuelos de corta distancia», añadió Schenk. .
WEF espera abordar lo que creen que es una crisis climática que azota al mundo a pesar de que la mayoría de los asistentes llegan en aviones privados, que son el modo de transporte más contaminante por pasajero.
Y se vieron caravanas de asistentes al Foro Económico Mundial en vehículos utilitarios deportivos (SUV) que consumen mucha gasolina y sedanes de alta gama.
Mientras tanto, los manifestantes climáticos pasaron la mañana del lunes bloqueando al menos un aeropuerto utilizado por los superricos.
«Davos tiene una estación de tren perfectamente adecuada, aún así estas personas ni siquiera se molestan en tomar el tren para un viaje tan corto como 21 km. ¿Realmente creemos que estas son las personas para resolver los problemas que enfrenta el mundo?» Schenk dijo.
Y recuerda, estas élites discutirán cómo remodelar el mundo mientras están custodiadas por soldados y fuerzas de seguridad privadas.
El hecho de que los asistentes al Foro Económico Mundial lleguen en masa en jets privados solo para hablar sobre la crisis climática es hipocresía en su máxima expresión.
Si realmente hubiera una crisis, ¿no tomarían el transporte público estos llamados guerreros climáticos para salvar el planeta?
Tal vez la crisis que promueve WEF es solo una exageración fabricada.
