Un equipo femenino de baloncesto de un instituto cristiano de Vermont renunció la semana pasada al torneo estatal de playoffs por negarse a competir contra un equipo con un atleta transexual masculino.
«Creemos que jugar contra un rival con un varón biológico pone en peligro la equidad del juego y la seguridad de nuestras jugadoras», declaró Vicki Fogg, directora de la Mid Vermont Christian School. «Permitir que varones biológicos participen en deportes femeninos sienta un mal precedente para el futuro del deporte femenino en general».
MVCS, el sembrado No. 12, abandonó el juego del martes contra la Escuela Long Trail en Dorset, según Valley News. El equipo no creía que la competición fuera justa para las chicas que competían en el partido.
Lauren Thomas, director ejecutivo adjunto de la Asociación de Directores de Vermont, dijo que recibió una carta de MVCS indicando que el equipo de las niñas no competiría en el torneo, aunque el aviso no dio detalles sobre la razón de la renuncia.
La decisión de MVCS de retirarse del juego envió al equipo de Long Trail del No. 5 al No. 4.
«He recibido llamadas (de escuelas) preguntando por las mejores prácticas y cómo seguir adelante sabiendo que iban a jugar contra un equipo con una mujer transexual», explicó Thomas. «Nos limitamos a apoyar nuestra postura y nuestras mejores prácticas a través de nuestra declaración de inclusividad».
Cabe señalar que la ley de Vermont permite a las mujeres transexuales -es decir, a los varones- competir en equipos deportivos femeninos.
