Fundador junto con Elon Musk de OpenAI, Altman venía del mundo de la inversión en startups antes de sumergirse en la Inteligencia Artificial
El 2022 acabó con la Inteligencia Artificial asombrándonos a todos con tecnologías de creación de imágenes y textos que unos meses antes nos parecían inconcebibles.
El nombre más importante tras estos avances es OpenAI, una organización surgida como instituto de investigación sin ánimo de lucro (aunque cada vez eso está menos claro dados sus lazos cada vez mayores con Microsoft) cuyo CEO, Sam Altman, se ha convertido en el nuevo hombre al que todos miran en el panorama tecnológico.
Pero, ¿cuál es su historia? Altman, de 37 años, natural de Chicago, criado en una familia judía y que estudió computación en la Universidad de Starnford. Tras probar varias iniciativas, comenzó a trabajar en Y Combinator, una de las inversoras en startups más conocidas.
En ella, Altman fue ganando responsabilidad hasta convertirse en su presidente, reemplazando a Paul Graham. En 2015, Altman cofundó OpenAI junto con Elon Musk, Ilya Sutskever, Greg Brockman y Wojciech Zaremba, todos ellos, además del multimillonario, inversores e investigadores con intereses profundos en la IA.
De la fundación de OpenAI a hacerla crecer
La organización fue creada con el objetivo de desarrollar y promover tecnologías de inteligencia artificial de manera responsable y segura. OpenAI se ha centrado en investigar y desarrollar tecnologías de IA avanzadas, como aprendizaje profundo y procesamiento del lenguaje natural, y ha publicado varios trabajos importantes en estas áreas.
En 2016, Altman anunció que OpenAI estaba construyendo una IA general, conocida como GPT-1, que podría realizar una amplia variedad de tareas, incluyendo escribir textos en lenguaje natural, traducir idiomas y responder preguntas. Dos años después, también se lanzó la primera versión de Dall-E. El modelo fue lanzado al público en 2018 y desde entonces ha evolucionado hasta generar ChatGPT y se espera que en poco tiempo se lance su versión 4.
Además de su trabajo en OpenAI, Altman es miembro del Consejo de Administración de la fundación de Peter Thiel (conocido por fundar PayPal junto con Musk y sus ligazones con Trump) y ha invertido en varias startups educativas.
