Morfema Press

Es lo que es

Armando Esteban Quito

El fiscal general de la República, Tarek William Saab, anunció que se emitió una orden de captura contra la periodista Carla Angola por el presunto delito de incitación al magnicidio, reseñó Alertas 24.

«Este 2 de agosto el Ministerio Público abrió una investigación contra Carla Angola Rodríguez con motivo de que públicamente en un programa de televisión con sede en Miami instigó a la perpetración de un magnicidio contra el presidente de la República, Nicolás Maduro Moros», dijo el fiscal.

«EE.UU. usa un drone y desaparece al segundo al mando de Al Qaeda y todo el mundo se pregunta en redes, ¿por qué no hacen lo mismo con Nicolás Maduro?», preguntó la periodista Carla Angola a un entrevistado.

«Con este tipo de acciones, Carla Angola está convicta y confesa», aseveró el fiscal.

La presentadora de televisión de Argentina, Viviana Canosa, expresó su indignación en un programa en vivo por el caso de un hombre transgénero con más de 30 semanas de gestación.

Por: SoyCentinela

“Sí, está embarazada, pero eres un tipo. Yo te digo algo: ¿sos hombre o sos mujer?. Pero si vos sos padre, no podéis dar la teta. O sea, el hombre no puede gestar, no da la teta; gestamos y damos la teta las mujeres”, expresó en el programa Viviana Con Vos.

Las declaraciones las ofreció mientras leía una nota publicada sobre el caso de Ian Alejandro Rubey, de 31 años de edad, quien pretende amamantar a sus bebés tras no extirparse las mamas en su transición. También planea dar a luz a los mellizos que espera a través de parto vaginal.

En declaraciones Infobae, Rubey afirmó que “estar embarazado no va en contra de mi masculinidad, ni siquiera con esta panza de 8 meses”.

“O sea, ustedes (transgéneros) quieren todo el combo, ser tipo, dar la teta, estar embarazados, paren un poco (…) Esto es una locura (…) vayan al psiquiatra todas, todos y todes”, añadió la presentadora argentina.

EL SIGLO XXI es una época de pensamiento débil. Se rechaza cualquier pretensión de verdad objetiva, más allá de las aseveraciones basadas en el método científico experimental, que reduce el campo de observación a lo cuantitativo y matematizable. Las grandes certezas sobre Dios, el hombre y el mundo que han definido a todas las civilizaciones, han sido sustituidas por convicciones subjetivas, suaves y adaptables, como escribe Russell Ronald Reno en El retorno de los dioses fuertes.

Por: Benigno Blanco / Nueva Revista

Reno ha defendido, no sin fundamento, que esta situación no es casual sino el fruto de un miedo colectivo y consciente a las verdades fuertes, como si estas implicasen necesariamente violencia e imposición. El siglo XX ha sido testigo de modas ideológicas que han destruido la fe en la razón y su capacidad de generar convicciones compartidas mediante un diálogo racional sobre el hombre y el bien y el mal. Pero el fruto de este ataque a la razón no ha sido un paraíso de tolerancia, como algunos soñaron, sino un mundo de inseguridades personales y colectivas generador de nuevas violencias y crisis.

El reto de nuestra época es reconstruir la confianza en nuestra capacidad de llegar racionalmente a seguridades intelectuales sobre la dignidad humana, el valor de la libertad, la igualdad en dignidad de todos los seres humanos, nuestra capacidad de identificar lo valioso

El reto de nuestra época es reconstruir la confianza en nuestra capacidad de llegar racionalmente a seguridades intelectuales sobre la dignidad humana, el valor de la libertad, la igualdad en dignidad de todos los seres humanos, nuestra capacidad de identificar lo valioso; y de compartir, con razones fundadas, estas seguridades con nuestros conciudadanos para construir así sociedades humanistas por convicción y no solo sistemas de coexistencia precaria.

La calidad humanista de nuestras sociedades –la democracia, el estado de derecho, el compromiso colectivo con la libertad y los derechos humanos– es herencia de lo mejor de la tradición occidental, basada en el aprecio a la razón de nuestros ancestros griegos, el compromiso romano con la justicia como medio de respetar lo suyo de cada cual, y la convicción cristiana de que todo lo que existe es bueno y digno, y que el mundo y el tiempo son tareas y oportunidades para construir el mejor mundo posible.

No hay que abandonar estas raíces de nuestra identidad colectiva para construir un futuro ilusionante. Al revés: el abandono de estas raíces es el gran peligro de nuestros días. Toca hoy aprender de los riesgos de los totalitarismos ideológicos y políticos del siglo XX para no recaer en los mismos errores; pero no al precio de rechazar las claves humanistas de nuestra civilización, pues el riesgo es sumergirse en un escepticismo general que impida compartir valores y construir comunidades.

DIAGNÓSTICO INTELECTUAL DE NUESTRA ÉPOCA

Nuestra época vive de los restos de los grandes sistemas filosóficos de los siglos XVII, XVIII y XIX; es decir, los restos del racionalismo cartesiano, el idealismo, el liberalismo, el marxismo, el nihilismo de Nietzsche; y también de los intentos bientencionados pero fallidos de superar las experiencias totalitarias del siglo XX mediante el rechazo a la posibilidad de verdades fuertes y sólidas: vive condicionada por la destrucción del concepto de naturaleza humana realizada por el estructuralismo, el existencialismo, el deconstruccionismo y tantos otros ismos que han marcado el tono intelectual de las universidades francesas y americanas (y de forma refleja, de otras muchas de todo Occidente) en la segunda mitad del siglo XX.

En ese humus cultural han surgido algunas de las tendencias o modas de pensamiento dominantes hoy, como la ideología de género, la doctrina o cultura woke, el animalismo y el transhumanismo. Todas ellas tienen en común la renuncia apriorística a observar e intentar comprender la singularidad del ser humano y la renuncia –también apriorística– al esfuerzo racional de entender la naturaleza humana y su valor como fuente de seguridades éticas, algo que había sido admitido desde Sócrates y Aristóteles como evidente, y ratificado por el cristianismo como coherente con la visión de un mundo preñado de sentido.

Es un reto de nuestra época repensar Occidente para intentar entender cómo hemos construido una civilización humanista, cómo la llevamos casi al colapso en el siglo XX y cómo hoy podríamos reiniciar un camino ascendente en vez de enfangarnos en la autodestrucción de lo mejor de que hemos sido capaces.

LOS ANTECEDENTES

La cultura occidental se ha caracterizado desde el siglo V a.C. por una clara apuesta por fiarse de la razón. Occidente se funda en la idea de que el hombre, razonando, se puede aclarar; de que mirando la realidad, puede discernir, con razonable certeza, lo verdadero y lo falso, lo bueno y lo malo. Este fue el planteamiento de Sócrates, Platón y Aristóteles. Cuando Roma se deja conquistar por la cultura griega, la razón se aplica también al uso del poder y así surge el sentido romano de la justicia: dar a cada uno lo suyo, reconociendo que hay algo suyo de cada cual que nos hace justos si lo respetamos. El cristianismo reforzó y justificó esas intuiciones: podemos fiarnos de la razón porque el mundo es razonable dado que fue pensado por Alguien muy inteligente; lo existente es bueno y digno de respeto porque fue querido por el Amor creador; nosotros podemos conocer el bien porque somos racionales y todo lo que existe es razonable.

Estos presupuestos le han permitido a Occidente descubrir la dignidad de la persona humana y la radical igualdad entre hombre y mujer; teorizar los derechos humanos; construir el Estado de derecho, precisamente para defender la libertad; y someter los últimos poderes del Estado a criterios éticos, aboliendo la pena de muerte, regulando con detalle la posibilidad de hacer la guerra, etc. Por eso en Occidente ha surgido el humanismo y la ciencia. La ciencia moderna presupone la creencia en que el mundo es razonable, y por eso puede ser racionalizado. Solo en el seno de la cultura occidental nos hemos planteado que podíamos conocer con certeza cómo es el mundo y cómo funciona la realidad física.

«Cuando todos se ríen de quienes afirman “eso es cierto” o “eso es bueno”, solo queda quien dice “yo quiero”», señaló C. S. Lewis en su ensayo de 1943 titulado ‘La abolición del hombre’

Pero entramos en crisis. La característica más importante de los últimos siglos es la paulatina desconfianza en la razón. Descartes nos hizo dudar de que con ella pudiésemos conocer con certeza la realidad de las cosas; y Kant nos convenció de que con la razón no podemos conocer la realidad de las cosas, tan solo su apariencia fenoménica –pero no el ser en sí–.

CONSECUENCIAS DEL VOLUNTARISMO

En los siglos XX y XXI, al quedar la razón bajo sospecha, han ocupado su lugar bien las emociones y los sentimientos, bien la voluntad. ¿Qué nos queda, si no hay capacidad de hacer juicios ciertos sobre la realidad o sobre las personas? Solo queda el «yo quiero». C.S. Lewis escribía en su ensayo La abolición del hombre (1943): «Cuando todos se ríen de quienes afirman «eso es cierto» o «eso es bueno», solo queda quien dice «yo quiero»». Si nos reímos de la capacidad de definir lo bueno y lo malo, objetivamente, con seguridad y con carácter universal, solo queda una voluntad subjetiva que no se puede medir con ningún criterio objetivo o racional, trátese de la voluntad personal en las relaciones privadas; la del que encarna el poder en cada caso o la del grupo identitario en las relaciones sociales.

Ese voluntarismo se traduce, en la vida colectiva, en el positivismo de las leyes: lo bueno es lo que decide el Parlamento o el gobernante de turno; lo justo es lo que dicen las leyes, y lo injusto lo que prohíben. Y en la vida privada, en el deseo individual, como fuente última de la moral: es bueno lo que yo quiero; es malo lo que yo no quiero. Y si no hay un criterio objetivo y universal de lo bueno y lo malo, el diálogo deviene imposible.

Esto último representa una amenaza para la democracia, que se basa en el diálogo. Si solo queda el voluntarismo del poder y falta la capacidad de crear el sustrato dialogado y compartido, las democracias se vuelven más débiles. De ahí vienen las pulsiones totalitarias que se perciben ya en nuestra época en forma de populismos, políticas de identidad, pretensiones de exclusión de la libertad de pensamiento o de creencias en materia de sexualidad, ataques a la objeción de conciencia, etc.

DISTINGUIR ENTRE CIENCIA Y CIENTIFICISMO

Otra consecuencia de la desconfianza en la razón es el cientificismo, una corriente ideológica que no es de ahora pero que tiene gran vigencia como tendencia de pensamiento actual. Es importante distinguir entre ciencia y cientificismo. La ciencia es un conocimiento sobre la base de la experimentación y la matematización del estudio de la realidad; en tanto que el cientifismo es una ideología que presupone que solo lo que se conoce por el sistema del método experimental y matematizado es cierto y seguro; y que todo lo que no es susceptible de cuantificación es subjetivo y arbitrario. Fuera de las certezas que son cuantificables el cientificismo no reconoce ninguna verdad. De manera que todo lo que se refiere al mundo del espíritu, del alma, de la inteligencia, de Dios, de la filosofía, de los valores, carecería de objetividad y certeza.

Fuera de las certezas cuantificables, el cientificismo no reconoce ninguna verdad. De manera que todo lo que se refiere al mundo del espíritu, de la inteligencia, de Dios, de la filosofía, de los valores, carecería de objetividad y certeza

La dignidad humana, los derechos humanos, el valor de la libertad…, por ejemplo, no son cognoscibles por los métodos propios de las ciencias experimentales, como no lo son el bien y el mal, la justicia y la injusticia. Así el cientificismo, casi sin querer, degrada lo más valioso de nuestra civilización. La cultura en general y los medios de comunicación están profundamente imbuidos de cientificismo, de manera que, frecuentemente, se nos transmite como ciencia lo que no deja de ser una postura ideológica reduccionista.

IDEOLOGÍA EVOLUCIONISTA

La ideología evolucionista (que es algo distinto del hecho de la evolución y añadido a este dato de hecho) ha introducido en nuestras mentes una minusvaloración del hombre: si todo procede de una evolución material, desde la química a la vida, hasta llegar a la especie humana, el ser humano no tiene más valor que el resto de las formas de vida que existen en el planeta, ni hay en él nada singular digno de aprecio particular. Esa fue la interpretación popular de la obra de Darwin El origen de las especies (1859). Conviene precisar que Darwin no fue un ideólogo evolucionista, sino un científico que teorizó la evolución, que no es lo mismo. Fue después de Darwin, y sobre todo con Herbert Spencer y Julian Huxley cuando, sobre la base de esa teoría, surge la ideología evolucionista como intento de explicación de la vida y del hombre como mera consecuencia de fuerzas materiales comunes a todo el ecosistema, algo ni evidente ni demostrado.

El cientificismo y la ideología evolucionista han dado una apariencia de solvencia científica al ateísmo contemporáneo, cuando lo cierto es que la cosmología que se deriva de las ciencias empíricas actuales es absolutamente compatible con un mundo en que la hipótesis de Dios es más que plausible. Los mitos ateístas de una deficiente ciencia decimonónica siguen pesando mucho hoy en la conciencia colectiva, aunque han sido arrumbados ya por la ciencia contemporánea, que nos da una imagen del mundo y la vida claramente abierta a la hipótesis teísta.

Consecuencia de todo ello es lo que el mencionado C.S. Lewis llamó la abolición del hombre. Durante el siglo XX muchas corrientes de pensamiento han pretendido suprimir a Dios y abolir la singularidad humana; numerosas teorías científicas y filosóficas han querido presentar al ser humano como un conjunto de estructuras, fruto del devenir de la evolución, que no tienen más contenido ni más valor que el resto de cosas materiales de la Tierra. Con el evolucionismo materialista se da por supuesto que no hay nada específico, espiritual en la persona –una evidencia para toda la civilización antes del siglo XX–.

Como no hay un sexo que defina a la persona, la sexualidad se convierte en algo fluido: todos podemos tener hoy una identidad y mañana otra distinta… construyendo continuamente la identidad sexual y la forma de expresarla en la sociedad

Esto lo llegan a teorizar filosóficamente los estructuralismos y los posmodernismos de los años 60, 70 y 80, con autores como Foucault, Derrida, Lacan, Vattimo, etc. Cuestionan la consistencia de todo lo real y también al hombre. Como apunta García Gibert en su ensayo Sobre el viejo humanismo: «El deconstruccionismo busca socavar todo cimiento y toda metafísica que permitan sostener, por abajo o por arriba, cualquier relato legitimador de sentido». El resultado es que el hombre no existe… es una palabra que decimos pero no expresa nada cierto ni consistente, es un significante sin significado.

LOS ANTIHUMANISMOS ACTUALES

Así se explican los antihumanismos actuales, como la teoría o ideología de género surgida en las décadas finales del siglo XX, a partir del momento en que el sexo se separa de la reproducción gracias a la píldora anticonceptiva y el aborto, y pasa a ser sin más un hecho cultural manipulable y moldeable ideológicamente.

El siguiente paso, relacionado con el anterior, es la teoría queer, muy presente en la cultura actual. Como no hay un sexo que defina a la persona, la sexualidad se convierte en algo fluido: todos podemos tener hoy una identidad y mañana otra distinta… construyendo continuamente la identidad sexual y la forma de expresarla en la sociedad. Esta teoría inspira hoy las leyes de los llamados derechos LGTBI, tan contestados desde el humanismo tradicional y desde el feminismo reivindicativo de los derechos de la mujer, pues la ideología queer niega al hombre… y a la mujer, dejando así al feminismo sin objeto.

LA CULTURA WOKE

Algunas de estas corrientes antihumanistas han cristalizado en un movimiento social, la llamada cultura woke, de fuerte implantación en Estados Unidos, pero cuya influencia se deja notar en todo Occidente. Se trata de una amalgama de planteamientos ideológicos modernos convertidos en activismo político. El detonante fueron el #MeToo de las feministas y el Black Lives Matter de los negros ante agresiones sexuales contra mujeres y de la policía contra personas de color, respectivamente, en EE.UU. Pero no se trata solo de una reacción puntual –y no sin justificación– ante hechos luctuosos, sino que ha llegado a englobar un movimiento más amplio y de más calado: el de los discriminados por razón de sexo (mujeres), género (LGTBI), raza (negros, latinos) que despiertan (de ahí viene el término inglés woke, del verbo to wake) y exigen a la sociedad que se reconozca su carácter identitario particular y su condición de víctimas, que los culpables sean castigados y que se reparen injusticias estructurales e históricas.

El instrumento de su guerra política es la llamada cultura de la cancelación. Hay que cancelar –sostienen– y suprimir del lenguaje, de las redes sociales, de la escenografía de las ciudades –calles, estatuas, etc.– todas aquellas circunstancias, personas, expresiones que identifican como agresivas para su identidad. Eso explica la censura a autores, el castigo a docentes, el derribo de estatuas, o las campañas en las redes sociales contra quienes no consideran políticamente correctos. Y todo ello con carácter retroactivo, revisando la historia. En esto se demuestra cómo no solo estamos ante movimientos que reivindican una causa política o social, sino también ante una revolución cultural que no se para ante el ataque a derechos fundamentales como la libertad de pensamiento y expresión.

ANIMALISMO

Otra expresión ideológica del antihumanismo actual es el animalismo, reflejado en la obra de autores como Peter Singer y en iniciativas legislativas como el Proyecto Gran Simio y con tentáculos políticos cada vez más presentes aunque aún minoritarios. Sus defensores señalan que como el ser humano es solo una especie más de la escala evolutiva, hay que reconocer a los animales parte de los derechos hasta ahora considerados como humanos. Es una ideología de moda en el mundo anglosajón, pero ya con ecos legislativos en Francia e incluso en España. Es significativo de lo absurdo de estos planteamientos que a los que quieren otorgar derechos a los animales no se les ocurre exigirles a los animales obligaciones como las que se exigen al ser humano, porque son conscientes de que al hombre podemos exigirle obligaciones porque es libre y responsable mientras que al resto de los animales no podemos exigirles lo mismo.

EL RETO TRANSHUMANISTA

Y finalmente, el transhumanismo. Es una propuesta ideológica basada en los avances de las ciencias y la nanotecnología en los campos de la genética, la cibernética, la inteligencia artificial y las neurociencias, que propugna una «mejora» del ser humano. Llega a proponer la promoción programada de un nuevo salto en la evolución del hombre que nos llevaría a crear una nueva especie, los posthumanos, que incluso podrían liberarse –dicen algunos autores– del soporte biológico de nuestra personalidad para integrarse en una red cibernética que, supuestamente, nos daría la inmortalidad. No se trata de curar –como hacía la medicina–, sino de transformar la naturaleza humana para mejorar la especie. Según el pensamiento transhumanista, nuestra especie es fruto de una evolución ciega guiada por el azar –postulado propio de la ideología evolucionista, como hemos visto antes–; pero los humanos estamos ya en condiciones de hacernos cargo de nuestra propia evolución como especie; y programar y diseñar el siguiente paso evolutivo.

Ya existen programas de investigación, con cuantiosos recursos económicos, que piensan en los nuevos mercados que se pueden abrir al socaire de las nuevas tecnologías y servicios a ofrecer

Las nuevas tecnologías permitirían este programa de mejora del hombre y de creación del nuevo posthumano. Las técnicas de reprogramación genética, la producción de órganos de sustitución en un medio animal o totalmente artificial y las posibilidades de hibridación entre hombre y máquina abren horizontes deseables, según esta ideología, para mejorar o sustituir a la actual especie humana por una nueva especie posthumana.

Algunas de estas propuestas pueden parecer de ciencia ficción y otras pueden ser razonables avances en la lucha noble contra la enfermedad y el dolor, pero lo cierto es que ya existen programas de investigación, con cuantiosos recursos económicos, que piensan en los nuevos mercados que se pueden abrir al socaire de las nuevas tecnologías y servicios a ofrecer. Estamos, por tanto, ante una ideología al servicio de un negocio; o quizá de un negocio que se viste de ideología presuntamente humanitaria.

NIHILISMO, APUESTA POR NADA

El fruto final de todos estos ismos es el nihilismo. La desconfianza en la razón ha supuesto un retorno al viejo nihilismo. Es la afirmación de que nada tiene sentido y de que las verdades no son objetivables, la idea de que el hombre es un ser abocado a un mundo caótico y sin propósito. Fue teorizado en el siglo XIX por Nietzsche, al que se puede considerar el pensador decimonónico más moderno hoy en día; de hecho, se sigue editando y leyendo. Su literatura es metafórica, apela al corazón y a los sentimientos, lo cual encandila a muchos. Esta apuesta por la nada como sentido y objetivo de la vida, este quitar valor a todo lo que existe, este rechazo a la razón clásica, a la ética, a las raíces cristianas de Occidente, va convirtiéndose en el humus cultural que impregna las tendencias de pensamiento del siglo XXI.

Lo que está en juego es lo mejor de la civilización humanista. Por ello conviene pensar en todo esto y no dejarse arrastrar sin más por la moda intelectual.

Consultores 21, en su esfuerzo de investigar y obtener datos que permitan conocer de una manera continua algunos aspectos de la situación del país, utiliza sus encuestas realizadas en hogares y con una muestra representativa, para explorar una serie de realidades que aquejan al venezolano.

Por: Morfema Press

En esta oportunidad presentaron el Informe “Diáspora” Nro. 13 de tan importante y sensible tema de la migración de los venezolanos en los últimos años.

”Diáspora”, recoge datos de una encuesta nacional de opinión sobre la emigración que Consultores 21 realiza desde 2015. Esta emigración que es el más grande éxodo poblacional de Venezuela en su historia republicana y a la vez el más grande de Latinoamérica.

El estudio arrojó que casi la mitad de las familias venezolanas (45%) tienen al menos un miembro que conformaba se núcleo en el exterior, entre los cuales el envío de remesas lentamente se convierten en un ingreso adicional importante.

El 30% de los hogares venezolanos están recibiendo remesas y el monto gira alrededor de los $60 en promedio. Este monto tuvo una fuerte caída en el periodo de la pandemia del coronavirus, revela Consultores 21.

El perfil de los venezolanos que quieren migrar son, en su mayoría, jóvenes de entre 25 y 44 años y con cercanía a la oposición. 3 de cada 10 venezolanos quieren irse del país y el 9% de todos ellos lo harán en los próximos 6 meses.

Los que declaran querer migrar tienen una visión más negativa sobre la situación del país y de la situación económica de su familia, en contraposición con los que no quieren migrar, y del total de los encuestados, quienes suelen ser más optimistas.

Los venezolanos que desean migrar, prefieren Chile, Colombia y los EE.UU como países de destino.

Destaca en el estudio que el 11% de los encuestados tienen familiares que se han regresado, estimando el número de personas que se han devuelto en poco más de 600.000, y la mayoría lo han hecho de Colombia y República Dominicana.

El flujo migratorio (salida y entrada del país) no permite que la cifra de retornados disminuya el número total de migrantes.

Resultados completos del estudio

El más reciente modelo de Ferrari de producción limitada, el SP3 Daytona, es el tercer miembro de la serie Icona después del Monza SP1 y SP2 de 2018. El exótico hiperauto fue diseñado para honrar la victoria 1-2-3 de Ferrari en los 24 Horas de Daytona allá por 1967.

Por: Carscoops / Traducción libre del inglés de Morfema Press

Tiene el motor de combustión interna más potente jamás creado en Maranello, oculto bajo una carrocería aerodinámica de baja altura con techo targa.

A primera vista, el SP3 Daytona parece un La Ferrari Aperta con una carrocería completamente rediseñada creada por Flavio Manzoni y su equipo.

Los diseñadores de Ferrari se inspiraron en las formas redondeadas de los hermosos P3/4, P330 y 412P que dominaron Daytona en los años 60, sin embargo, el hiperauto moderno tiene una postura más agresiva con bordes más definidos.

En la parte delantera, hay un divisor prominente y «bumperettes» que hacen referencia al 330 P4 (1967) , mientras que la parte delantera afilada se encuentra más baja que los guardabarros abultados que recuerdan a los autos de carrera Ferrari anteriores. Los faros LED tienen una estructura compleja y un mecanismo emergente con ‘párpados’ retráctiles, una vez más haciendo referencia a modelos anteriores, mientras que las aletas horizontales en las tomas son un tema que continúa en la espectacular parte trasera, pero más adelante.

El perfil está fuertemente esculpido con puertas de mariposa que integran una caja de aire y presentan una superficie inspirada en el 512 S (1969-1970). El parabrisas envolvente y los espejos montados en los guardabarros contribuyen a la apariencia exótica y ayudan a la aerodinámica. Gracias a las tomas de aire montadas en las puertas, no hay necesidad de las tradicionales tomas de aire laterales, lo que permite un diseño más sexy y limpio para los guardabarros traseros con curvas. Las exclusivas ruedas de cinco radios están calzadas con neumáticos especiales Pirelli P Zero Corsa desarrollados para el SP3 Daytona.

La parte trasera es probablemente la vista más dramática del automóvil que parece un concepto mientras envía serias vibraciones retro. La tira de LED horizontal para las luces traseras está integrada en las numerosas aspas que cubren toda la zona por encima del difusor de fibra de carbono. Un conjunto de tubos de escape trapezoidales montados en alto comunican el glorioso sonido del motor V12. Este último se esconde bajo una hermosa cubierta de metal con una columna central para mejorar la refrigeración.

La aerodinámica jugó un papel clave en el desarrollo del SP3 Daytona, con Ferrari afirmando que tiene «el más alto nivel de eficiencia aerodinámica pasiva» entre todos sus modelos. Esto se logró gracias a soluciones innovadoras para la gestión eficiente de la disipación de calor de los componentes mecánicos, junto con un diseño inteligente para la refrigeración y la carga aerodinámica. La innovación más notable en el segmento aerodinámico en realidad no es visible: un par de chimeneas en el piso en la parte trasera de la parte inferior de la carrocería están conectadas a rejillas en las aletas traseras a través de conductos verticales, lo que maximiza el flujo de aire y aumenta la carga aerodinámica.

Interior minimalista de inspiración retro

En el interior, los asientos fijos son una parte integral de la cabina, se fusionan sobre el túnel central y se expanden en los umbrales laterales con tapicería de colores vivos que hace juego con la moldura circundante. Este diseño está inspirado en los autos de carreras de los años 60, donde el conductor se sentaba sobre cojines directamente unidos al chasis. De hecho, el puesto de conducción es más bajo y reclinado en comparación con otros modelos de Ferrari, similar al de un monoplaza.

El tablero tiene un aspecto minimalista con tapicería de gamuza y un grupo de instrumentos digitales curvos de 16 pulgadas que incorpora el sistema de infoentretenimiento. El volante se parece bastante al de La Ferrari con un solo dial manettino y botones integrados que permiten al conductor acceder al 80 % de las funciones del vehículo sin quitar las manos de él. Otro elemento interesante es la puerta de cambio de marchas y, por supuesto, mucha fibra de carbono expuesta.

Enfoque tradicional de los fundamentos modernos de motor central

El hipercoche podría compartir el monocasco de fibra de carbono con La Ferrari, pero abandona el sistema de propulsión híbrido por una receta más tradicional. Tanto el chasis como la carrocería están fabricados íntegramente en materiales compuestos (composites aeronáuticos, kevlar, fibra de carbono, etc), para el menor peso posible.

El V12 de 65° V12 de 6.5 litros de aspiración natural con nombre en código F140HC se basa en la unidad del 812 Competizione , pero presenta una serie de actualizaciones centradas en la admisión y el escape, con la ayuda de su reubicación en una posición central trasera. El ICE (Internal Combustion Engine) más potente jamás construido por Ferrari produce 829 hp (618 kW / 840 PS) a 9250 rpm y 697 Nm (514 lb-ft) de torque a 7250 rpm, con un limitador de revoluciones a 9500 rpm. La potencia se envía al eje trasero a través de una caja de cambios de 7 velocidades de doble embrague F1 más rápida con la ayuda de un diferencial de deslizamiento limitado.

Como resultado, la Daytona SP3 acelera de 0 a 100 km/h (0 a 62 mph) en 2,85 segundos y de 0 a 200 km/h (0 a 124 mph) en 7,4 segundos, mientras que su velocidad máxima supera los 340 marca de km/h (211 mph). Si bien esas características no establecen récords, siguen siendo impresionantes para un automóvil de aspiración natural solo ICE, especialmente si consideramos que las cifras de rendimiento de Ferrari a menudo son significativamente mejores en la vida real en comparación con las especificaciones oficiales.

599 unidades a 2 millones de euros cada uno, pero llegas demasiado tarde

Finalmente, al igual que los modelos anteriores de Icona, el SP3 Daytona será una edición limitada. Ferrari fabricará 599 ejemplares, cada uno de los cuales costará 2 millones de euros (alrededor de 2,3 millones de dólares al tipo de cambio actual) más impuestos locales. Sin embargo, Autonews informa que el jefe de marketing y ventas de Ferrari, Enrico Galliera, dijo que los 499 propietarios de Monzas decidieron comprar también el Daytona SP3, mientras que los otros 100 se vendieron a un grupo «selecto» de coleccionistas de Ferrari, por lo que el nuevo hipercoche es efectivamente vendido.

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Antes de que Nancy Pelosi aterrizara en Taipei para una controvertida reunión con la presidenta Tsai Ing-wen, la Casa Blanca tuvo cuidado de no intervenir en el viaje y enfatizó que la presidenta de la Cámara toma sus propias decisiones.

Por: Bloomberg / Traducción libre del inglés de Morfema Press

Pero detrás de escena, los funcionarios de la administración del presidente Joe Biden estaban furiosos por su insistencia en usar el viaje como punto culminante de su carrera en un momento de relaciones muy delicadas con Beijing.

En un esfuerzo por persuadir discretamente a Pelosi de que retrase la visita, la Casa Blanca envió a altos miembros del Consejo de Seguridad Nacional, así como a funcionarios del Departamento de Estado, para informar a la oradora y a su equipo sobre los riesgos geopolíticos, dijeron personas familiarizadas con las conversaciones.

Cuando quedó claro que Pelosi no podía ser influenciada, la administración en cambio planeó contingencias, estableciendo una lucha para garantizar que los canales de comunicación con Beijing funcionaran y se pudieran minimizar las consecuencias.

Eso incluyó reuniones entre funcionarios estadounidenses y sus homólogos en la embajada china en Washington, dijeron personas familiarizadas con el asunto. Se les concedió el anonimato para discutir las deliberaciones privadas.

Pero incluso cuando intentaron convencer al equipo de Pelosi de que ahora no era el momento adecuado para irse, los funcionarios de la administración sabían que tenían que planificar la posibilidad de que ella lo hiciera y prepararse para cualquier respuesta china.

La incapacidad de persuadir a Pelosi para que posponga agrega otra complicación para una administración que aún está descifrando su enfoque hacia China. Y dejó a los funcionarios de Biden en la incómoda posición de ser eclipsados ​​por uno de los oradores de la Cámara de Representantes más poderosos de los tiempos modernos, que nunca ha rehuido hurgar en China y no tiene miedo de molestar a cualquiera que se interponga en su camino.

Cuando los funcionarios chinos en Beijing convocaron al embajador de EE. UU. para presentar una protesta formal, Nicholas Burns reiteró que la administración de Biden quería evitar cualquier escalada y tenía la intención de mantener abiertas todas las líneas de comunicación, según un portavoz del Departamento de Estado.

El viaje de Pelosi se produjo cuando se espera que pronto termine su carrera histórica como la primera mujer presidenta de la Cámara. Si bien es probable que sea reelegida para su escaño en la Cámara de Representantes de San Francisco, los republicanos parecen estar preparados para capturar la mayoría de la cámara y Pelosi llegó a un acuerdo en 2018 con los miembros más jóvenes de la Cámara que acordaron límites de mandato de liderazgo.

Pelosi, de 82 años, valoró la discreción de sus miembros sobre el viaje y estaba especialmente disgustada con las filtraciones que su equipo creía que surgieron de la administración de Biden en un esfuerzo por obligarla a cancelar la visita, dijeron personas familiarizadas con el asunto.

Una portavoz del NSC dijo que las acusaciones de que la administración lo filtró a propósito son falsas. El portavoz de NSC, John Kirby, los calificó el martes de «desafortunados» y señaló que la oradora debería poder viajar en sus propios términos.

La información sobre la visita fue estrictamente ocultada, incluso a los legisladores que acompañaban a Pelosi. No recibieron el itinerario completo del viaje, incluida la confirmación de la escala en Taiwán, hasta el día en que partieron y solo después de que la delegación había abordado el avión.

El viaje inicialmente iba a realizarse en abril, pero se pospuso cuando Pelosi dio positivo por covid-19. La oficina de Pelosi continuó aclarando a los miembros que iban a estar en ese viaje que simplemente estaba en espera.

Las comunicaciones entre el equipo del orador y la Casa Blanca fueron tensas, y se agregó tensión cuando Biden a fines de julio dijo a los periodistas que el ejército estadounidense se oponía a los planes de viaje no confirmados de Pelosi.

Cuanto más intentaba la administración intervenir tras bambalinas, más se atrincheraba Pelosi.

En un momento, su equipo sugirió que podría considerar retrasar el viaje si el presidente se lo pidiera públicamente. Los asesores de Biden no creían que fuera una buena idea, sobre todo porque no estaban seguros de que ella cumpliría, dijeron personas familiarizadas con el intercambio.

Después de días de tratar los planes de viaje como hipotéticos, el lunes, los funcionarios de la Casa Blanca cambiaron de tono. Antes de que Pelosi aterrizara en la región, Kirby advirtió a Beijing que no reaccionara de forma exagerada ante una posible detención de Taiwán ni la usara como pretexto para aumentar las tensiones.

El martes, cuando aterrizó y China emitió amenazas de ejercicios militares alrededor de la isla, Kirby repitió sus advertencias y dijo que Estados Unidos estaba preparado para manejar cualquier cosa que Beijing decidiera hacer en respuesta.

La Casa Blanca se negó a decir si el presidente apoyó personalmente el viaje del orador y si cree que beneficia los objetivos de la política exterior de Estados Unidos.

Biden dijo este año que apoyaría la intervención militar si China invadía Taiwán, un comentario que sus asesores retrocedieron rápidamente y aclararon. Sin embargo, personas familiarizadas con las deliberaciones internas dijeron que el presidente probablemente estaba diciendo lo que pensaba en ese momento, al tiempo que enfatizó que no tendría impacto en la política de larga data de Una China.

Resolución de acero

Los funcionarios estadounidenses han pasado los últimos 19 meses tratando cuidadosamente de recalibrar la relación con China lejos de la imprevisibilidad de la administración Trump. Han enfatizado la necesidad de comunicaciones claras para evitar consecuencias no deseadas o un malentendido que podría conducir a un conflicto.

En sus menos de 24 horas sobre el terreno, Pelosi también se reunió con líderes empresariales y de derechos humanos. Su mensaje, dijo, fue un apoyo inquebrantable a Taiwán frente a las amenazas de Beijing.

El viaje fue coherente con su marca política, que ha construido sobre su férrea determinación de hacer frente a los matones. A lo largo de su carrera, ha adoptado una postura más dura sobre China que prácticamente cualquiera de los presidentes estadounidenses con los que ha tratado.

En medio del desconcierto continuo del New York Times ante cualquier persona que se oponga a la reorganización total de la civilización occidental en torno a la prevención de un solo virus respiratorio, Sheera Frenkel ha escrito lo que puede ser el artículo más vergonzoso del periódico hasta la fecha: un artículo de gran impacto contra los padres cuyas opiniones políticas cambiaron durante Covid debido a la antipatía por el cierre y los mandatos escolares.

Por: Michael P Senger – Brownstone Institute / Traducción libre del inglés de Morfema Press

Frenkel expresa su perplejidad ante los instintos básicos que muestran estos padres para defender y proteger a sus hijos, incluso a expensas de otras preferencias políticas:

Casi todos en la multitud de más de tres docenas eran padres. Y cuando protestaron un viernes reciente en el suburbio de Orinda, California, en el Área de la Bahía, tenían el mismo estribillo: estaban allí para sus hijos.

La mayoría nunca antes había estado en un mitin político. Pero después de ver a sus hijos aislados y abatidos al principio de la pandemia de coronavirus , se desesperaron, dijeron. En Facebook, encontraron a otros padres preocupados que simpatizaban con ellos. Compartieron notas y artículos en línea, muchos de ellos engañosos , sobre la reapertura de las escuelas y la eficacia de las vacunas y las máscaras. Pronto, esos problemas desplazaron otras preocupaciones.

En opinión del Times, los instintos protectores de estos padres pobres e ignorantes pronto los llevaron a la madriguera del culto antivacunas al estilo de QAnon:

La Sra. Longnecker y sus compañeros objetores son parte de un nuevo movimiento potencialmente desestabilizador: padres que se unieron a la causa contra las vacunas y las mascarillas durante la pandemia, reduciendo sus creencias políticas a una obsesión resuelta sobre esos temas. Su pensamiento se endureció incluso cuando las restricciones y los mandatos de Covid-19 se relajaron y levantaron, cimentándose en algunos casos en un escepticismo de todas las vacunas .

Casi la mitad de los estadounidenses se oponen al enmascaramiento y una proporción similar está en contra de los mandatos de vacunación para los escolares, según muestran las encuestas. Pero lo que se oscurece en esos números es la intensidad con la que algunos padres han adoptado estos puntos de vista. Si bien alguna vez se describieron a sí mismos como republicanos o demócratas, ahora se identifican como independientes que planean votar basándose únicamente en las políticas de vacunas.

Pero peor aún, en su desconcertante celo por evitar que el estado use un estado de emergencia indefinido para aterrorizar, dañar y adoctrinar a sus hijos, estos padres se han radicalizado, creando un nuevo movimiento político fanático e impredecible que amenaza las vacas sagradas del Partido Demócrata. y, peor aún, la estabilidad laboral de sus cuadros:

Casi la mitad de los estadounidenses se oponen al enmascaramiento y una proporción similar está en contra de los mandatos de vacunación para los escolares, según muestran las encuestas. Pero lo que se oscurece en esos números es la intensidad con la que algunos padres han adoptado estos puntos de vista. Si bien alguna vez se describieron a sí mismos como republicanos o demócratas, ahora se identifican como independientes que planean votar basándose únicamente en las políticas de vacunas.

Su transformación inyecta un elemento impredecible en las elecciones intermedias de noviembre . Impulsados ​​por un sentido de rectitud después de que terminaron los mandatos de vacunas y mascarillas contra el covid, muchos de estos padres se han vuelto cada vez más dogmáticos, convencidos de que, a menos que actúen, se aprobarán nuevos mandatos después de las elecciones intermedias.

Para respaldar sus creencias, algunos organizaron mítines e interrumpieron las reuniones de la junta escolar local. Otros están recaudando dinero para candidatos antimáscaras y antivacunas como JD Vance , el candidato republicano al Senado en Ohio; Reinette Senum, candidata independiente a gobernadora en California; y Rob Astorino, candidato republicano a gobernador en Nueva York.

En opinión de Frenkel, estos padres han abrazado el fanatismo antivacunas, independientemente de si realmente lo dicen o incluso se lo dicen en sus entrevistas con ella:

The Times tiene una larga historia de lucha por la excelencia, y en esta búsqueda se han superado a sí mismos con un nuevo y emocionante participante en la competencia por el peor artículo de todos los tiempos. Aparentemente, la estrategia de los demócratas de cara a las elecciones intermedias es animar a su base a creer que las preocupaciones sobre la educación, el bienestar y la seguridad de sus hijos durante el covid-19 no son más que una iniciación en un submundo oscuro de radicalismo antivacunas similar a un culto. Veremos cómo funciona eso para ellos.

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La visita que concluyó este miércoles a Taiwán de Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, ha devuelto a la actualidad el conflicto que enfrenta a China con Taiwán, una isla que el gigante asiático considera parte inalienable de su territorio.

Por: El País

“Estados Unidos ha venido para dejar claro que no abandonaremos a Taiwán”, ha dicho Pelosi. Este respaldo ha enfurecido a los gobernantes chinos, que alertan a Washington de “estar jugando con fuego” y amenazan con una respuesta contundente a lo que consideran una provocación por parte de Estados Unidos A continuación, se repasan las claves de un conflicto que, pese a alargarse desde el fin de la II Guerra Mundial, se ha agravado en los últimos años como consecuencia de la mayor asertividad de la China de Xi Jinping en la defensa de sus intereses y de un distanciamiento progresivo por parte de los taiwaneses respecto del gigante del otro lado del estrecho de Formosa.

¿Qué consecuencias podría acarrear la visita a Taiwán de Pelosi?

La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos es la política estadounidense de mayor rango en poner un pie en la isla desde la visita en 1997 de Newt Gingrich. Entonces, China estaba en pleno proceso de integración de Hong Kong —anexionado por el Reino Unido en 1842 y devuelto a Pekín en 1997—, y optó por tragarse su enfado. Además, el republicano Gingrich, entonces también presidente de la Cámara de Representantes, viajó bajo la Administración del demócrata Bill Clinton, lo que desde China se interpretó como una lucha interna entre los dos partidos. Pelosi, por el contrario, es demócrata, al igual que el actual presidente, Joe Biden.

En estos 25 años, China se ha convertido en un país mucho más rico, mucho más armado y que demuestra menos paciencia con Taipéi, que, según la perspectiva de Pekín, no tiene derecho a cultivar sus propias relaciones exteriores. Que altos funcionarios extranjeros visiten el territorio “rebelde” se interpreta como una muestra de apoyo a su independencia.

China lleva semanas advirtiendo de que se opone firmemente a la visita y no dudará en adoptar “medidas contundentes”. Pekín anunció el martes nuevas maniobras militares alrededor de Taiwán durante los próximos días, incluidas algunas con misiles. El espacio aéreo y marítimo de la provincia de Fujian (la más cercana a Taiwán) ha quedado abierto exclusivamente al ejército.

Además, ha prohibido la importación de productos de más de un centenar de empresas taiwanesas de los sectores de la alimentación, agricultura y pesca. Los analistas anticipan un aumento del número de ejercicios militares chinos en la región y la aprobación de nuevas sanciones contra la isla. Ven, sin embargo, poco probable que la escalada de tensiones desencadene un conflicto bélico.

¿Cuál es el statu quo de Taiwán?

Taiwán no es una región administrativa especial de China, como Hong Kong y Macao, sino que funciona como un Estado de facto, que cuenta con un Gobierno elegido democráticamente, una Constitución y un ejército con unos 300.000 activos. Taiwán es, además, la 21ª potencia económica mundial, y líder de la industria de los semiconductores, área en la que ocupa más del 65% de la cuota de mercado.

China, sin embargo, considera a la isla una provincia “rebelde” cuyo Gobierno es “ilegítimo”. Las relaciones diplomáticas del gigante asiático con el resto de los países se basan en el principio de una sola China, que significa precisamente eso: China no hay más que una, y esta incluye Taiwán.

La cuestión taiwanesa ha sido una constante en la política del Partido Comunista de China, aunque el discurso se ha endurecido desde la llegada al poder del actual presidente, Xi Jinping. El objetivo primordial del Gobierno chino es frenar cualquier posibilidad de una declaración formal de independencia, y otorga primacía a la “reunificación” pacífica, aunque no descarta el uso de la fuerza como último recurso. En palabras del propio Xi, la reunificación es “una misión histórica del Partido”.

¿Ha sido Taiwán históricamente parte de China?

Taiwán estuvo bajo dominio total chino entre 1683 y 1895, durante la dinastía Qing. En 1895, tras la derrota de China en la I guerra sino-japonesa, el país se vio obligado a ceder el territorio a Japón.

Con el fin de la II Guerra Mundial en 1945, la República de China —vencedora del conflicto, en el bando de los aliados— obtuvo el consentimiento de Estados Unidos y Reino Unido para gobernar la isla. Tras la victoria del Partido y el Ejército comunistas en la guerra civil china en 1949, los líderes nacionalistas del partido Kuomintang, la formación que había gobernado China hasta ese año, huyeron a Taiwán, donde Chiang Kai-shek instituyó el Gobierno de la República de China en el exilio. En la parte continental, Mao Zedong declaraba la fundación de la República Popular China.

¿La comunidad internacional reconoce a Taiwán como Estado?

La Organización de Naciones Unidas dejó de reconocer a Taiwán como un Estado soberano en 1971, año en el que transfirió el reconocimiento diplomático a Pekín. Desde entonces, el número de países que han establecido lazos bilaterales con la República Popular China en detrimento de la República de China (el nombre oficial de Taiwán) ha ido en aumento. Actualmente, solamente 13 naciones y el Vaticano mantienen vínculos diplomáticos con Taiwán en lugar de con China.

¿Cuáles son los intereses de Estados Unidos?

China y Taiwán están separadas por una distancia de 160 kilómetros a través del estrecho de Formosa. Taiwán forma parte de lo que se conoce como la “primera cadena de islas”, en las que se incluye una serie de archipiélagos que tradicionalmente se consideran “amigos” de Estados Unidos y son clave para el juego de poderes en Asia-Pacífico.

Estados Unidos siempre ha mantenido una relación “no oficial” con la isla y defiende su “ambigüedad estratégica” a través del Acta de Relaciones con Taiwán, aprobada por el Congreso norteamericano en 1979, año en el que reconoció al Gobierno en Pekín como el representante de China.

Precisamente por esa ambigüedad, la cuestión taiwanesa se ha convertido en uno de los puntos más delicados y que genera más tensiones y desencuentros entre las dos principales potencias mundiales. Washington es el principal proveedor de armamento de Taiwán y, tal y como ha dicho Biden abiertamente en tres ocasiones —aunque fue corregido de inmediato por su equipo de prensa—, sería su mayor aliado militar en caso de conflicto bélico con China.

¿Cómo ha evolucionado la relación de Taiwán con China?

Después de 38 años de régimen de partido único por parte de la formación política Kuomintang ―el periodo más largo de la historia en el que un territorio ha estado bajo la ley marcial, solo superado posteriormente por Siria―, en la década de 1990 Taiwán experimentó una serie de reformas democráticas y aperturistas. En 2000, se impuso por primera vez en las elecciones un partido diferente, el Partido Progresista Democrático de Taiwán (PPD), abiertamente a favor de un distanciamiento con China. En 2008, el Kuomintang volvió al poder e intentó mejorar las relaciones con China a través de acuerdos comerciales y de inversión.

La victoria en 2016 de la actual presidenta, Tsai Ing-wen, del PPD, y especialmente su reelección por mayoría absoluta en 2020, supusieron un duro golpe para Pekín. La mayor línea divisoria en la política taiwanesa es la independencia o la unificación con China mientras que, en medio, están aquellos a favor de mantener el statu quo y la posición de Taiwán como Estado de facto. Oficialmente, el Kuomintang —ahora en la oposición— acepta el principio de una sola China y no desestima la unificación en el futuro, mientras que el PPD considera que la República de China es ya un Estado independiente.

¿Qué quieren los taiwaneses?

Según un estudio de junio de 2022, la gran mayoría quiere mantener el statu quo de manera indefinida. Solamente el 5,2% apoya la independencia, mientras que el 1,3% aspira a la reunificación con China. En cuanto a la nacionalidad, más del 60% de la población se identifica como taiwanesa, mientras que poco más del 30% lo hace como chino-taiwanesa.

El BMW M3 E30 es ya un deportivo icónico de los años 80 por derecho propio, muy deseado por los aficionados. Sin embargo, por si eso no fuera suficiente, debes saber que hay un exclusivo BMW M3 E30 Cecotto Edition, de 1989, a la venta en Reino Unido, originalmente destinado al mercado alemán y, por tanto, con volante a la izquierda.

Por: Antonio Aimar – Motor1

Fue el primer M3 en utilizar el motor S14, un 2.3 de cuatro cilindros mejorado, con 218 CV de potencia máxima. Y aunque este propulsor se convirtió posteriormente en el estándar del M3 Evolution en Europa, solo se fabricaron 480 unidades del Cecotto Edition. Si estás interesado, prepárate para desembolsar 120 mil dólares.

Además del motor, los carros BMW M3 Cecotto Edition tienen cristales traseros más finos para reducir el peso, aerodinámica Evolution II, puntas de escape cromadas y cauchos especiales de aleación negra de 16 pulgadas con contornos en contraste.

Bajo el capó, la tapa de válvulas del S14 se adapta de fábrica a uno de los tres colores exteriores disponibles en el Cecotto Edition, a saber, Rojo Misano, Plata Nogaro o Azul Macao. Ninguno de ellos estaba disponible en el M3 estándar.

El interior del Cecotto Edition es el típico sueño de un joven entusiasta de aquellos años, acabado en tejido M-Technic, con un uso abusivo del tricolor M Sport y un pomo del cambio iluminado (solo con versión manual). Básicamente, está dominado por la opulencia propia de los ‘Fabulosos 80’, que pusieron fin al oscuro periodo histórico de los ‘Años de Plomo’ anteriores.

Una placa identificativa y numerada en la consola central confirma que el ejemplar en venta es el número 341 de 505, ya que los Cecotto Edition se construyeron junto a 25 unidades del Ravaglia Edition, aún más raro y exclusivo, solo para Reino Unido. El piloto italiano Ravaglia y el italo-venezolano Cecotto elevaron el BMW M3 a la categoría de leyenda entre los turismos deportivos de la época.

El auto en venta tiene la carrocería en color Azul Macao, un púrpura intenso que parece casi negro bajo la luz artificial, a juego con la tapicería Bisonte Plateado del interior. El cuentakilómetros marca 87.405 millas (unos 140.665 kilómetros y fue sustituido por un lector del sistema imperial después de ser exportado de Alemania a Gran Bretaña). La unidad se entrega con un dosier de todos los registros de mantenimiento certificados.

Johnny Cecotto, el as venezolano de las ruedas

Johnny Cecotto es un auténtico as del automovilismo, especialmente con las dos ruedas: antes de cumplir los 20 años se convirtió en el protagonista de una de las mayores y más espectaculares remontadas de la historia del motociclismo, saliendo último (por un problema técnico) y quedando tercero en la Daytona 200 de 1975, tras 74 adelantamientos. Ese mismo año se convirtió en el piloto más joven en ganar un Gran Premio de motociclismo.

En 1981 entró en el mundo de las cuatro ruedas en la Fórmula 2 y luego pasó a la Fórmula 1, primero con Theodore en 1983 y luego con Toleman en 1984, junto a Ayrton Senna. Su carrera parecía prometedora cuando sufrió un grave accidente durante los entrenamientos del Gran Premio de Gran Bretaña en el que se rompió las dos piernas.

Aunque su carrera en la F1 se interrumpió ahí, Cecotto siguió compitiendo con el deportivo BMW en las series para turismos, ganando el campeonato italiano en 1989 y el alemán en 1994 y 1998. Por ello, Cecotto contribuyó a ‘grabar’ el M3 en la mente de los entusiastas como uno de los mejores turismos deportivos jamás construidos, ganando las 24 Horas de Spa y Nurburgring.

No solo eso, porque también llegó a ser un icono durante la época dorada del Grupo A, una era que dio a luz modelos como el M3, pero también el Mercedes-Benz 190E 2.5 Evolution o el Nissan Skyline GT-R R32.

Melinda French Gates dijo que hubo una serie de factores que la llevaron a tomar la decisión de divorciarse de su esposo durante 27 años, Bill Gates, incluido su trabajo con el difunto financiero caído en desgracia Jeffrey Epstein.

Por: Vanity Fair / Traducción libre del inglés de Morfema Press

La filántropo abordó públicamente su divorcio por primera vez en una nueva entrevista con Gayle King que se emitió en CBS This Morning el jueves, y explicó que «no fue una cosa, sino muchas cosas» las que llevaron a la desaparición de su matrimonio.

“No me gustó que tuviera reuniones con Jeffrey Epstein, no. Se lo dejé claro”, explicó, y agregó que se reunió con el traficante sexual condenado “exactamente una vez” porque “quería ver quién era este hombre”.

Ella continuó: “Me arrepentí en el momento en que entré por la puerta. Él era aborrecible. Era el mal personificado. Mi corazón se rompe por estas mujeres”. En un comunicado a CBS, Bill dijo que “Reunirme con Epstein fue un error que lamento profundamente. Fue un error sustancial de juicio”.

Melinda también habló abiertamente sobre la aventura de su exmarido con un miembro del personal hace 20 años, que un portavoz del cofundador de Microsoft confirmó en mayo de 2021.

«Ciertamente creo en el perdón, así que pensé que habíamos resuelto algo de eso». ella confesó “No fue un momento o una cosa específica que sucedió.

Llegó un momento en el que había suficiente allí y me di cuenta de que no era saludable y no podía confiar en lo que teníamos”.

Cuando King le preguntó si hubo otras aventuras en el transcurso de su matrimonio, el copresidente de la Fundación Bill y Melinda Gates respondió: «Esas son preguntas que Bill debe responder».

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